Edward Heath toma la batuta de la Joven Orquesta de la Comunidad Europea

La Joven Orquesta de la Comunidad Europea, integrada por 130 jóvenes maestros, alumnos destacados de los conservatorios de los diez países miembros de la CEE, iniciará, a partir del próximo mes de julio su gira anual por Europa -Italia, República Federal de Alemania, Francia, Irlanda y Grecia-, que culminará con una serie de actuaciones en China y Extremo Oriente.

Edward Heath, el ex primer ministro británico, apreciado por su batuta tanto o más que por sus intervenciones en el Parlamento, es uno de los promotores de esta Joven Orquesta creada hace cinco años para difundir con su música el mensaje europeísta por el mundo.Para Heath, la Joven Orquesta de la CEE «aporta el humanismo y la riqueza espiritual a una comunidad cansada de cifras y problemas económicos». Los músicos conocen su responsabilidad de «mantener en lo más alto las tradiciones culturales europeas», ha dicho el político británico.

Junto al propio Heath, la orquesta de los jóvenes europeos va a ser dirigida en los conciertos que ofrezca este verano por su director titular, Claudio Abbado, por el argentino Daniel Barenboim y por Rafael Kubelik. El gran reto que se le presenta en su programa de 1981 es mantener el elevado nivel conseguido hasta ahora a juicio de la crítica, pues, como ya es tradicional en el funcionamiento de esta orquesta juvenil, este año se incorporarán 65 nuevos instrumentistas, seleccionados en los conservatorios de sus países de origen entre los más dotados de las últimas promociones. Con este relevo anual de la mitad de los músicos que forman el grupo se pretende dar a todos los países miembros las máximas posibilidades de compartir responsabilidades y honores en la representación de los ideales europeístas que esta orquesta de jóvenes encarna en su expresión musical.

La imagen de la Joven Orquesta de la Comunidad Europea se difundió a través de Eurovisión en un concierto que ofreció el año pasado y que se pretende convertir en un rito anual de solidaridad. En su visita a Italia poco después de producirse el terremoto que asoló el sur de aquel país la orquesta actuó para los damnificados de Avellino, la localidad más afectada por la catástrofe, y, unos días más tarde, el papa Juan Pablo II ofreció una audiencia a sus 130 componentes.

La creación y el funcionamiento de esta orquesta comunitaria juvenil constituye la mejor preparación para celebrar el próximo año 1985 el Año de la Música, tal y como han acordado las autoridades de la CEE, conmemorando el tercer aniversario de tres gigantes de la música clásica: Juan Sebastián Bach, Jorge Federico Haendel y Domenico Scarlatti.

Con esta celebración se trata de divulgar el patrimonio musical europeo por todos los rincones del continente y evitar que parezca reservado a una minoría selecta, tarea que ya ha empezado a realizar en los cinco años de su existencia la Joven Orquesta de la Comunidad.