Polémica elección a presidente de la Española

La polémica envuelve ya las próximas elecciones a presidente de la Federación Española, que se celebrarán dentro de algo más de un mes: el 26 de julio. En principio, la fecha, muy avanzado ya el verano, no parece precisamente la ideal, salvo para que pasen inadvertidas, por si llegara a producirse algún tipo de problemas. El Consejo Superior de Deportes, no se conoce exactamente por qué, tardó en remitir los estatutos a una federación que ha salido sin mancha del tema de las auditorías, pero que parece olvidar el sentido democrático actual. El reparto de los votos es insólito.Existen unas fechas, unos márgenes, y la Federación se ha acogido a ello, pero aprovechándose de unas infraestructuras que dejan mucho que desear, aunque ahí están. Mientras tanto, estos días se están celebrando las elecciones en las federaciones provinciales, y no hay precisamente una gran demanda de candidatos. Puede que sea porque en el baloncesto es muy difícil mojarse o porque haya cierta desmoralización ante el caciquismo existente, pese a la nueva ley del deporte.

Cabe señalar que los cerca de 3.000 entrenadores españoles sólo tienen un único voto para el conjunto y que a todos los jugadores españoles de todas las categorías les representa por obra y gracia, no se sabe de quién, un voto de la AEBl (Asociación Española de Baloncestistas Internacionales). Esto, en ningún modo, significa que todos los internacionales hayan sido consultados previamente para este tema concreto. Una cosa es que asignen o acepten un representante y otra muy distinta que compartan su criterio en temas concretos para los que no son consultados.

Ernesto Segura de Luna ha confirmado que se presentará a la reelección, porque quiere seguir en el cargo hasta los Juegos Olímpicos de Los Angeles. Y seguirá casi con seguridad. Es el favorito indiscutible, porque los que tienen derecho a voto no son los que juegan, los que viajan como pueden, sufren en las canchas al aire libre y se tienen que comprar las camisetas, sino los que, de una u otra forma, gozan de los favores -tampoco se pueden llamar privilegios- federativos. En una palabra, que se pregunta a los que mandan si quieren que siga mandando el de siempre, para que todos sigan en sus puestos. No es difícil entonces adivinar la respuesta.

Gasca, única oposición

José Antonio Gasca ya se dirigió a la Española como candidato a la presidencia. Sin embargo, no se puede confirmar esto oficialmente, ya que aún no se abrió el plazo de inscripción. Dentro del mundillo del baloncesto existe el rumor de una candidatura -cada candidato debe presentar un equipo de ocho hombres para su directiva- que se puede definir como independiente, capitaneada por hombres que siempre fueron del baloncesto, pero a los que es difícil encasillar. En cualquier caso, el deporte de la canasta goza de buena salud. Los conservadores se apuntan a seguir con lo que hay y los exigentes quieren algunos cambios. El banquillo del baloncesto español se mueve constantemente, pero, como en las canchas, no siempre con acierto.