La Federación Internacional sigue oponiéndose al Lotus de Colin Chapman

La Federación Internacional del Deporte del Automóvil (FISA) acaba de hacer pública una nota en la que se pone de manifiesto que dicha federación no ha tomado parte en la reciente legalización del Lotus 88, última y revolucionaria obra del genial Colin Chapman.

El Lotus 88 había sido declarado ilegal por los comisarios técnicos de la carrera de Long Beach, primera de la temporada, y, días después, considerado conforme a reglamentos por la comisión técnica norte americana. Según la FISA, el acuerdo norteamericano carece en absoluto de vali.dez fuera de Estados Unidos.Una vez más, la imaginación y la técnica revolucion arias de un hombre, cuyo carácter de genio no puede ponerse en duda, ponen de manifiesto la rigidez de las estructuras y la cantidad de lagunas que suelen tener la mayoría de los reglamentos técnicos en la fórmula 1. Ambos acaban desembocando en frenazos al progreso.

Colin Chapman es el hombre que más, y más profundamente, ha modificado la, fórmula 1. La mayoría de los elementos que utilizan los coches que corren en esta competición hoy día han surgido de la mente de Chapman. Cosas que a nadie parecen sorprender ahora fueron, en su día, inventos revolucionarios. Inventos a los que los burócratas intentaron oponerse, pero sin conseguirlo.

El británico inventó, hace cuatro años, la técnica wing-car. Se trata de concebir el monoplaza de tal forma que, en movimiento, actúe de igual forma que un ala, pero con el efecto invertido. De esta forma, en lugar de tener una tendencia a despegar, como ocurre en las alas de los aviones, con el sistema de Chapman los coches tienden a aplastarse contra el suelo en las curvas de altas velocidades.

Su técnica dio el título mundial al primer piloto de su escudería, el ítalo-norteamericano Mario Andretti, en 1978. Más tarde fue copiada, e incluso perfeccionada, por el resto de los equipos. Pero la Federación Internacional consideró que era la razón fundamental de los últimos accidentes, y decidió su supresión.

El chasis

El acuerdo final entre las dos partes en conflicto supuso la eliminación de las faldillas, elementos aerodinámicos imprescindibles para la utilización de la técnica wing-car. Eso hizo que algunos como Colin Chapman pensasen en la forma de seguir adelante con esta técnica, aunque de forma legal. Colin Chapman concibió entonces una suerte de chasis que, en realidad, es doble. Son dos, uno superpuesto al otro, pero unidos entre sí. De esta forma, el diseñador de los Lotus lo que pretende es que los elementos aerodinámicos, que, según la reglamentación, no deben ser móviles, sino fijos con respecto a la carrocería, actúen como fijos respecto a una parte del chasis, pero no respecto a la otra.Ahora, cuando parecía que los comisarios técnicos norteamericanos se ponían del lado de Chapman y le daban la razón, a vuelto a salir al paso la FISA para desacreditar a esos técnicos y declarar que sólo ella puede decidir.