Aumenta la intranquilidad en torno al secuestro de Quini

Los familiares de Quini continuaban anoche esperando una llamada de los secuestradores, que se supone son suramericanos. Desde la noche del lunes no han vuelto a tener contacto con ellos, aunque ayer tarde se afirmaba que quien había hablado telefónicamente con ellos era el presidente del Barcelona, José Luis Núñez. Jesús Castro, que quiso hacer una llamada a sus familiares de Asturias, salió del domicilio de su hermano, a fin de mantener el teléfono libre con la esperanza puesta en la llamada de los secuestradores, que exigen cien millones de pesetas.Ayer tarde, el presidente de la Federación Española de Fútbol, Pablo Porta, afirmó que todo era cosa de horas, pero el Gobierno Civil de Barcelona manifestó que no se tenían noticias de que la resolución del caso fuera a producirse de manera inmediata.

A medida que transcurren las horas, la intranquilidad de la familia aumenta, y al mismo tiempo también crecen las posibilidades de que la próxima jornada de Liga sea aplazada. Los directivos del Barcelona continúan en junta permanente.

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