La FISA quiere más dinero de la fórmula 1

La Federación Internacional del Deporte del Automóvil (FISA), quien, según palabras de sus altos directivos, quiere hacerse con el control de la fórmula 1, para ayudar a los organizadores de las carreras y evitar la presión económica de la Asociación de Constructores (FOCA), ha creado unos contratos en los que, por paradójico que resulte, exige a los organizadores de carreras del Mundial más dinero del que solicitaba Bernie Ecclestone.Por lo que respecta al Gran Premio de España, que organiza el Real Automóvil Club de España (RACE), y que tuvo grandes problemas en su última edición, EL PAIS ha podido saber que no existe aún decisión sobre de qué lado inclinarse. El interés general del RACE es que los pilotos y constructores y la Federación Internacional lleguen a un -cada día más difícil- acuerdo. En caso de que éste no se produzca, el organizador español tendrá que tomar postura.

En la última carrera, el RACE se inclinó del lado de los pilotos y en contra de la FISA. De una parte, por la consciencia de que el deporte está en los pilotos y no en los federativos. De otra, porque mientras los federativos contaban con siete pilotos, la otra parte sumaba tres veces más. Y, finalmente, porque, según el contrato firmado entre Bernie Ecclestone y el RACE, en caso de pérdidas, éstas son afrontadas por la FOCA, que, por contra, se lleva la parte más importante de los beneficios en caso de haberlos. Esa seguridad de no exponer un montante superior a cuarenta millones de pesetas puede ser definitivo para un organizador como el RACE, que nunca puede contar con el éxito económico garantizado, como ocurre en otros circuitos.

Para la próxima temporada, la FOCA, después de haber creado su propia federación y su propio mundial, con independencia del de la Federación Internacional, quiere contar con una serie de circuitos que le apoyen. Entre ellos está el del Jarama.

Por su parte, la FISA, en su conflicto con los constructores, tiene de su parte a la legalidad federativa, muy importante para organizar las carreras. También tiene de su lado a las marcas que ya le apoyaron en el conflictivo Gran Premio de España, es decir, Ferrari, Renault, Alfa Romeo y Osella. A éstas podrían añadirse Toleman, si es que llega a formarse, y Talbot, si termina por firmar un acuerdo en ese sentido con Guy Ligier.

La FISA, entre sus condiciones, expone que los comisarios deben ser controlados por la Federación Internacional. Que ésta nombrará también al director de la carrera y que el RACE deberá depositar una cantidad de dinero que es superior en un 12%, a lo que antes tenía que hacer con Bernie Ecclestone y la FOCA. En definitiva, nuevos problemas para la fórmula 1, cuyo futuro inmediato cada vez se ve menos claro con los conflictos existentes.