La enfermedad de Salvador Dalí
En relación al artículo publicado en el número 226 de la revista Interviu, en parte reproducido, citando su origen, en EL PAÍS del pasado día 11 de septiembre, quiero hacer constar:1. En ningún momento he entregado a la Prensa el informe neurológico del Salvador Dalí y nunca he autorizado a que dicho informe fuera publicado. A pesar de lo que ponen las primeras líneas de dicho artículo, ni Gala ni ninguna de las personas no médicas allegadas a Dalí me habían pedido dicho informe.
2. El informe neurológico que vi.ene fotografiado en la revista Interviu no está firmado y es un resumen del historial clínico que yo había elaborado para la consulta que tuve el día 25 de junio de 1980 con el profesor Juan Obiols (Q. E. P. D.), con el profesor Antonio Puigvert y con el profesor Luis Barraquer Bordás. En este informe no se llega a ninguna conclusión diagnóstica, y en ningún iriomento se dice que Dalí tenga la enfermedad de Parkinson, puesto que se trata de un informe previo, incompleto, personal y confidencial que yo debía someter a la consideración y a la. crítica de los doctores antes citados.
3. Que por el momento ignoro a ciencia cierta cómo la revista Interviu ha podido obtener este informe. Lo que sí puedo afirmar es que el día 27 de junio, a los dos días de la consulta antes reseñada, me fue sustraída la cartera que utilizo cuando efectúo una visita fuera de mi consulta, y que allí se encontraba un informe de Salvador Dalí, idéntico al que ha sido publicado.
4. Quiero hacer hincapié, de forma taxativa, en que todo lo que consta en el apartado «explicación final» ha sido elaborado por el periodista que firma el artículo; que no estoy de acuerdo con los comentarios que allí se hacen y que son los que han dado origen al titular, totalmente erróneo, que encabeza el artículo, y que dice textualmente: «Un proceso degenerativo irreversible».
5. Debo aclarar que en el apartado «Exploración», en donde se transcribe el examen clínico neurológico por mí efectuado, corres
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ponde únicamente al del día 14 de mayo de 1980, cuando visité por primera vez a Dalí, y, por tanto, antes de que hubiera iniciado el tratamiento neurológico y psiquiátrico al que luego ha sido sometido.
6. La última visita médica que efectué a Dalí es la consulta que tuvimos con los profesores Obiols, Puigvert y Barraquer el día 25 de junio de 1980, y en la cual, de común acuerdo, se indicó el tratamiento y el plan general de vida que debía seguir Dalí.
7. Por las informaciones directas y recientes que he recibido del doctor Ramón Vidal Teixidor, del profesor Puigvert y de Gala, me consta que Dalí ha experimentado una notable mejoría y que ha vuelto a pintar y a escribir de forma muy satisfactoria.
8. Por último, quiero señalar que el artículo publicado por Interviu sin mi consentimiento puede dañar tanto los intereses de Dalí o de sus allegados como mis propios intereses profesionales, ya que la forma en que ha sido redactado se presta a que, con la mayor buena fe, se haga una serie de interpretaciones a veces totalmente alejadas de la verdad. Es por ello que no me consideraré responsable de ninguna información que, basándose en el artículo de Interviu, pueda dar una versión equivocada, tanto si hace referencia a la enfermedad de Dalí como a mi actuación profesional. /
