PSOE y PCE piden más energía de las FOP contra la ultraderecha
Las recientes muertes del dirigente vecinal Arturo Pajuelo y del soldado Juan Carlos García Pérez, según todos los indicios a manos de grupos de extrema derecha, han desencadenado una larga serie de comunicados de condena y de paros parciales en numerosas empresas y centros universitarios madrileños.El PSOE ha declarado que no basta con declaraciones de condena, sino que los responsables del orden público deben evitar que en la calle impere «la ley de los gansters y que los elementos ultraderechistas siembren el terror asesinando a las salidas de los cines, al término de las manifestaciones, en despachos laboralistas, en cafeterías o incluso buscando a las víctimas en su propia casa, como ocurrió con Yolanda». El comunicado concluye advirtiendo que cada vez estamos más próximos a la situación que se da en los paises dictatoriales de América Latina.
El comunicado del PCE pide más energía en la actuación de las FOP, porque «sin complicidades y ayuda esas bandas de asesinos no podrían agredir, asesinar y alterar la vida ciudadana. Otra cosa sería si los responsables del orden público actuaran con más celo y energía en la defensa de la vida y tranquilidad de los españoles».
La Unión General de Trabajadores pide el desarme y desarticulación del terrorismo de derechas, lo mismo que se hace con el de izquierdas, y se lamenta de los constantes atentados que sufre la clase trabajadora ante la pasividad policial mientras se oprime a los trabajadores en el ejercicio del derecho constitucional de huelga con detenciones, encarcelamientos y multas.
El presidente de la diputación madrileña, el socialista Carlos Revilla, exige, a través de un escrito público, que el Gobierno tome medidas inmediatas y eficaces para la localización y puesta a disposición judicial de los ultraderechistas que han agredido a ciudadanos madrileños durante estos últimos días. Revilla añade que el único fin de las bandas fascistas es sembrar el terror y el desorden en una degradación de autoridad que la democracia no puede tolerar.
En medios universitarios se produjeron distintos paros simbólicos en algunas facultades. En Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma, los estudiantes pararon durante una hora, respondiendo a una convocatoria del profesorado «para protestar por las recientes agresiones realizadas por jóvenes de extrema derecha en centros universitarios». Los alumnos protagonizaron también una asamblea a media mañana para debatir la situación creada.
En resumen, todos los comunicados plantean al Gobierno la exigencia de que los responsables sean juzgados y que se tomen todas las medidas necesarias.
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