El príncipe Thibaut de Orleans,

el hijo más pequeño del conde de París y oveja negra, según las crónicas, de la familia de los descendientes de Luis XIV, ha sido inculpado por un tribunal de Tarbes (Francia) por complicidad en un intento de robo. La historia comenzó el pasado 31 de marzo, cuando dos hombres fueron sorprendidos por la policía mientras intentaban robar numerosos cuadros de valor de la residencia de la viuda del doctor Courty, en la mencionada ciudad de Tarbes. Los dos presuntos ladrones fueron rápidamente identificados como Aimé Riffertn, un delincuente con antecedentes penales, y Jacques Bonnaud, director gerente de la galería de arte parisiense La Tour de Neslé, de la que es propietario el príncipe Thibaut.La policía detuvo posteriormente al príncipe, de 32 años de edad, y fue conducido a Tarbes, donde se le comunicó el procesamiento y se le puso en libertad provisional después de seis horas de interrogatorio.