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Versiones contradictorias del CSD sobre la auditoría de las federaciones

El secretario general del Consejo Superior de Deportes (CSD) aseguró ayer a EL PAIS que las auditorías encargadas por dicho organismo sobre ocho federaciones deportivas no estaban terminadas. Sin embargo, al vicepresidente económico de la Federación de Fútbol -una de las investigadas- le aseguró que si lo estaban y le prometió enviarle una copia de las conclusiones a que los censores jurados han llegado respecto a dicha Federación. Por otra parte, el actual presidente de la Federación de Judo, Pascual Juan Olmo, manifestó que no le extrañaría que en la suya se hubiesen encontrado irregularidades en la época a la que correspondió la investigación, anterior (1978) a su mandato.

EL PAIS intentó infructuosamente durante la jornada de ayer ponerse en contacto con el presidente del CSID Benito Castejón. Sólo fue posible hablar con el secretario general, Florencio Noriega, segunda autoridad de dicho organismo, que aseguró no saber nada de las citadas auditorías: «He preguntado a los encargados de esa cuestión y me han asegurado que aún no están terminadas; así que pienso que de todo eso no hay nada. No sé de dónde ha salido. En cualquier caso, y por lo que recuerdo yo de la época en que se encargaron esas auditorías, no se trataba de investigaciones propiamente dichas, sino de una forma de encarar una posible codificación de los datos económicos de las federaciones para llevar todas esas cuentas por computadoras en el futuro.»El fútbol, a la espera de las conclusiones

La versión facilitada a EL PAIS por Florencio Noriega contrasta con la que este mismo personaje facilitó a Gregorio Paunero, vicepresidente y encargado de asuntos económicos de la Federación de Fútbol: «A la vista de la noticia me puse en contacto con Florencio Noriega, y éste me dijo que me enviará en breve las conclusiones a que los censores jurados llegaron en nuestra Federación. Así podrá ver las pegas que nos ponen. Sólo entonces podré contestar de una forma más fundamentada. Por ahora, sólo le puedo repetir lo que le dije ayer: que en esta Federación todo está claro, que no hemos perdido ni una factura y que no me explico qué problemas puedan existir.»

Respecto a la afirmación de que no se trataba de investigaciones como tales, sino de un estudio para pasar las contabilidades a computadoras, la impresión de los presidentes de federaciones investigadas consultados por EL PAIS no era ésa; todos ellos pensaban que se trataba de una investigación pura y simple. Las federaciones que fueron objeto de investigación son las de Fútbol, Baloncesto, Balonmano, Patinaje, Lucha, Deporte Universitario, y Judo y Disciplinas Asociadas -hoy divida en dos, Judo y Kárate- Según las informaciones recogidas por El PAIS, las irregularidades habrían aparecido en las de Fútbol (ochocientos millones de presupuesto en 1978, año investigado), Patinaje (cuarenta millones), Judo (veintiocho) y Lucha (veinte).

Patinaje: las cuentas, a disposición de quien las quiera

Antonio González es el presidente de la Federación de Patinaje. No admite que, bajo ningún concepto, se hayan encontrado irregularidades en las cuentas de su Federación: «Yo hablé con los censores jurados de cuentas que envió el CSD, y me dijeron que estaban admirados de la competencia del contable que tenemos nosotros. No me explico de dónde han salido esos rumores acerca de que en nuestra Federación hay irregularidades; pero aprovecho para anunciar que las cuentas están a disposición del PSOE o de quien quiera ir a verlas.» Antonio González estaba molesto por la existencia del rumor: «Si hubiera algo, creo que no es correcto que yo me haya enterado por la prensa. El Consejo debió avisarme. Hoy he intentado ponerme en contacto con ellos, pero no lo he conseguido.» Respecto a por qué había sido su Federación escogida entre ocho, tampoco le encontraba explicación: «Ignoro los criterios que se siguieron para esa selección. Desde luego, a mí no me preocupó ni me molestó que escogieran la mía, porque yo estaba tranquilo respecto a nuestras cuentas. Es más, hace mucho que he dicho que las cuentas de las federaciones deberían ser revisadas anualmente y que se sepa quiénes llevamos las cosas con limpieza y quiénes no.»

Judo: muchas cosas turbias

Preside la Federación de Judo Pascual Juan Olmo, que ocupa el cargo desde enero de 1979. La auditoría se realizó sobre el año 1978: «Quede claro, pues, que yo no conozco el estado de las cuentas anteriores a mí. Ni siquiera firmé el finiquito, porque no se me presentó. Lo único que sé de cuentas anteriores a mi mandato es que me encontré una deuda de algo más de seis millones que había que pagar a la Mutualidad General Deportiva. En lo que respecta al ejercicio del año 1979, unos censores designados por nuestra asamblea investigaron las cuentas y las encontraron correctas. Pero de lo anterior, insisto, no sé nada. Lo único que sé es que durante los seis últimos meses de 1978 el Consejo colocó a un funcionario suyo como secretario y tesorero de la Federación, de modo que alguna idea debían de tener en el Consejo acerca de cómo iban esas cuentas.»

El anterior presidente de la Federación de Judo fue Antonio García de la Fuente. Fue apartado del puesto cuando, a petición de la Federación Catalana, el CSD decidió investigar las cuentas de la Española; la investigación fue sobreseída más tarde. A García de la Fuente le sucedió su vicepresidente, Rafael Martín Peña, que fue asesinado en circunstancias aún no esclarecidas. Un incendio en los locales de la Federación Castellana destruyó los archivos de la misma y terminó de complicar las cosas.

«En definitiva», explica Pascual Juan Olmo, «no sería sorpresa para mí que los censores jurados no hubieran sacado gran cosa en limpio, pero insisto en que no me preocupa. Yo creo que ahora el Consejo tiene más confianza en esta Federación, porque nos han aumentado sensiblemente la subvención. En 1978 esta Federación recibía veintiocho millones; ahora recibe 36. Porcentualmente, es el mayor aumento concedido a ninguna Federación. Eso yo lo interpreto como que tienen confianza en cómo lo gastamos ahora.»

Lucha: la cuenta de la vieja

La Federación de Lucha está presidida por Fernando Compte, que no admite la posibilidad de que haya irregularidades en sus cuentas: «Esta es una Federación muy modesta. Nuestro presupuesto en 1978 era de veinte millones, entregados todos íntegramente por el Consejo. A nosotros nos llegaron los censores jurados a primeros de diciembre, y sólo estuvieron tres días viniendo por aquí, porque esto es fácil, es la cuenta de la vieja. Se les enseñaron los libros y las facturas y no comentaron que nada estuviera mal. Y, desde luego, el que crea lo contrario puede venir por aquí a ver las cuentas. Esto es muy poco dinero para que se pueda esconder nada. Esa información es equivocada, seguro. El lunes hablaré con el Consejo para que me aclaren en qué consisten las pegas que han puesto, pero estoy completamente tranquilo.»

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