La mejora de la productividad, alternativa para salir de la crisis

«La mejoría de la productividad es la vía más poderosa para salir de la crisis.» En opinión del catedrático japonés de Economía Industrial, Kazukiyo Kurosawa, del Instituto Tecnológico de Tokio y máxima autoridad mundial en el tema de la productividad, la mejoría de ésta debe estar regida por la idea de mantener el número de operarios en plantilla.Para Kazukiyo Kurosawa, que ayer desarrolló una ponencia en el Seminario sobre Productividad, Política de Empleo y Reestructuración Económica, que organiza en Madrid la Dirección General de Política Económica del Ministerio de Economía, en colaboración con la OIT, el primer esfuerzo para mejorar la productividad se debe dirigir a la reasignación y reeducación de las fuerzas de trabajo que ha desplazado la nueva concepción tecnológica. Si este esfuerzo «no lo pueden hacer las propias empresas, la responsabilidad de la tarea debería asumirla el Ministerio de Trabajo». Ilustró el profesor Kurosawa estas apreciaciones con el desarrollo de la «ofensiva primaveral» de Japón el presente año. En la discusión de los convenios colectivos las dos partes, patronos y sindicatos, fueron conscientes de que no se debería aumentar la tasa de desempleo y que era imprescindible controlar la inflación. Para conseguir ambos objetivos, se llegó a la aceptación de una tasa de crecimiento salarial reducida».

Para el profesor Kurosawa, «la productividad no debe ser definida como un cociente out-put/im-put, sino como un objetivo que debe alcanzar todo el país. Es un resultado combinado de mejoras de la ingeniería, de la tecnología y del esfuerzo humano. Todos los grupos sociales -patronales, sindicatos y Administración- relacionados deben participar en el movimiento social de mejora de la productividad nacional. Cada una de estas organizaciones tiene un papel propio y único en el proceso de mejora, sin cuyo concurso no se puede desarrollar ese objetivo».

Por lo que respecta a la tarea de los sindicatos, Kazukiyo Kurosawa manifestó a EL PAIS que éstos «deben asumir su papel para mejorar la productividad, deben ser la vanguardia en esa tarea. Sin sindicatos no se puede hablar de productividad». En Francia e Italia, añadió el profesor, ese rol desapareció de la organización por la dura lucha que protagonizaron sindicatos y organizaciones patronales.

Después de incidir en la idea de que la mejora de la productividad es imprescindible para salir de la crisis, el profesor Kurosawa afirmó que «en una primera época de crisis hay que educar al pueblo en la necesidad de proceder a esa mejoría».

Acerca del reparto de las mejoras productivas, Kazukiyo Kurosawa destacó que se hace necesario «alcanzar un acuerdo global en este terreno, entre los agentes sociales: sector público, empresarios y sindicatos. Es preciso acordar qué parte de ingresos se destina a inversión, cuánto a Seguridad Social y otros gastos públicos y cuánto a salarios. Tiene que haber algún tipo de acuerdo en los países democráticos. No puede decidir por sí sola ninguna de las partes. Se trata, en definitiva, de un movimiento institucionalizado y espontáneo; por tanto, nunca forzado».

En la inauguración del seminario, que se prolongará aún dos días, el director general de Política Económica, Crisanto Plaza, subrayó que la política de crecimiento de la productividad interesa por igual a los trabajadores y a los empresarios por las repercusiones que tiene sobre el bienestar general.

En este punto, Crisanto Plaza puntualizó los objetivos que debe perseguir la acción de la Administración: maximización de la producción de bienes y servicios, conciliación entre el objetivo del crecimiento de la productividad y del empleo, mejora de la posición competitiva de España en el mercado internacional y mejoras en las condiciones de trabajo como elemento importante para alcanzar aquellos puntos.