"Quo usque tandem..."

¿Hasta cuándo van a abusar de nuestra paciencia? Como estudiantes de COU que somos, que éramos, porque acabamos el curso a mediados de mayo (en una evaluación precipitada, con notas precipitadas, conocimientos precipitados y, en general, en un curso caótico), nos enteramos en un lindo martes primaveral de que ese viernes debían estar puestas las notas de la quinta evaluación, y en la semana siguiente, las finales.Como ex estudiantes de COU que somos, empezarnos, por sí acaso había, a preparar la selectividad (el último BOE que se pronunciaba sobre el tema negaba la existencla de ésta). Unos días después, nos confirman que, efectivamente, sería entre el 19 y el 30 del presente mes. Empezamos a preparamos, a la vez que ya íbamos forjando planes para este verano, una vez libres de esa axfislante e incierta nebulosa que se había creado en tomo a un examen, que aún no sabemos si será tal.

El 21 de junio leemos en los periódicos que ésta se pospone hasta julio. ¡Bravo, señor ministro! ¡ Enhorabuena a ustedes señores catedráticos! Gracias por darnos todo un mes de junio ¡sin clases!

No nos ha bastado con ser los conejillos de un plan insípido, sino que, además, se juega con nosotros. Huelgas, poco interés en las clases, y lo que es peor ninguna orientación universitaria (en vez de un COU ha parecido un NOU) las clases se han limitado a ser un cuarto de BUP. Y el 21 de junio leemos en los periódicos que la selectividad se aplaza hasta julio.

¿Quo usque tandem abutere patientia nostra?