Puntualización del delegado en Coplaco

En un artículo-entrevista elaborado por Angeles García, y publicado en la sección de Madrid de EL PAÍS del jueves 7 de junio, se incorporan determinadas frases entrecomilladas que parecen responder a afirmaciones rotundas mías y que son producto de una conversación amplia y que exige situarlas en su contexto adecuado y con los matices que el tono coloquial y la totalidad de la conversación les dan.Por otra parte, se citan nombres que en ningún momento fue la intención colocar en la línea argumental que se presenta.

Por todo ello, me gustaría señalar lo siguiente:

a) Que la frase «que al menor intento de maniobra política dejo el cargo» responde a la idea real de que yo no estaría interesado en el puesto si de crear dificultades a los ayuntamientos se tratara como objetivo único.

b) Cuando dice la periodista que «un sector de UCD se opuso a mi nombramiento», responde a la idea real de que personas aisladas tenían otra idea de la persona que debía ocupar dicho cargo, pero no a sectores de UCD, que no existen.

c) En cuanto a la referencia que se hace de don Enrique Castellanos, es simplemente el nombre de una de las personas que perfecta y naturalmente podría haberse hecho cargo del puesto, sin que para nada haya intervenido en este asunto.

Sirvan estas líneas de aclaración de lo dicho en el artículo citado, no con ánimo de centrar la atención en mí persona, que Dios me libre, sino con el interés de dejar las cosas claras.

Aprovecho la ocasión para señalar que cuando en la cabecera del artículo se dice que serán quince los representantes del Estado y once los de la Administración local, son trece y trece, como se desprende del texto del artículo. Creo que todo se debe a la prisa con la que se ven obligados a trabajar los periodistas.

(Delegado del Gobierno en Coplaco)