Sólo seis accidentes menos graves en la "operación retorno"
El desarrollo de la operación retorno al final de las fiestas de Semana Santa puede calificarse como tranquilo y normal, en opinión de un portavoz de la Dirección General de la Guardia Civil de Tráfico. En amplias fases del fin de semana, los desajustes circulatorios en los accesos a la capital fueron, casi, los habituales en días festivos, y los accidentes, escasos en número, no fueron mortales y podrían ser atribuibles tanto a la densidad de tráfico como al mal tiempo.Poco después de las doce de ayer, el portavoz de la Dirección General de la Guardia Civil comunicaba a EL PAIS que «a esta hora la circulación es ya normal en todas las carreteras. Cabría la posibilidad de que en las próximas horas regresara todavía algún contingente de automovilistas rezagados, pero ya no son previsibles los agobios ni los grandes atascos».
Dentro del aceptable nivel de normalidad, la operación retorno ha tenido malos momentos. «El domingo hubo que aplicar las distintas medidas de emergencia para mejorar el tráfico. Hasta las tres o las cuatro de la madrugada fue preciso dar cortes; es decir, habilitar altemativamente los dos carriles de que consta la calzada para circular en un solo sentido e interrumpir entre tanto la circulación en el otro. De esta manera, la marcha se hizo más fluida. El índice de accidentes también ha sido bajo; ayer, domingo, se produjeron cinco o seis, sin muertes, que pudieron ser consecuencia de las malas condiciones atmosféricas en la misma medida que del exceso de viajeros. Podría decirse que estos accidentes son los habituales en los accesos a Madrid cada fin de se mana».
Se da la circunstancia que la vía más peligrosa en los días de fiesta ha sido el trayecto desde Alcobendas a Barajas. «Los accidentes en ella, sin embargo, probablemente han afectado precisamente a las personas que se han quedado en Madrid, más que a las que se fueron de vacaciones.»
Al mediodía, la carretera nacional VI era la que soportaba mayor circulación, «concretamente unos 2.500 vehículos por hora hasta las doce». En el mismo período de tiempo, por la nacional V entraban en Madrid 1.500. automóviles, y en la nacional IV, 1.100.
