"Existen puntos oscuros entre la ley Electoral y la Carta Especial de Madrid"

El anuncio de que el pleno escoba del próximo día 6 no será el último, ya que el día 16 tendrá que haber otro para la firma de actas; los distintos puntos oscuros entre la Carta Especial de Madrid y la ley Electoral, y la defensa de los funcionarios municipales ante los comentarios de algunos candidatos a la alcaldía fueron los temas más sobresalientes tratados ayer en la penúltima conferencia de prensa con el alcalde Luis María Huete.La disposición aparecida en el Boletín Oficial del Estado del pasado día 24 hace que las corporaciones cesantes celebren una reunión especial tres días antes de que tomen posesión de sus cargos los nuevos concejales. Al ser el 19 de abril la fecha prevista para este acto, el señor Huete manifestó que el día 16 se firmarían en un pleno «que no se puede llamar extraordinario» las actas pendientes. Se mantiene la fecha del día 6 para la celebración del último pleno oficial y de la última reunión de la Comisión Municipal de Gobierno.

Preguntado sobre las disparidades entre la ley Electoral y la Carta Especial, por la que se regula el Ayuntamiento madrileño, el señor Huete dijo que verbalmente le había comunicado ya al director general de Administración Local una serie de puntos oscuros como el papel del secretario, miembro de la Corporación en la actualidad, y cuyo futuro no está determinado, o si la designación de sesiones públicas es aplicable a la Comisión de Gobierno y las comisiones informativas.

El señor Hute volvió, como hizo la semana pasada, a defender a los funcionarios acusados de incompetencia (véase página 21) e informó sobre los conflictos de la EMT y taxis. Sobre la entrevista que el alcalde les concederá a estos últimos el próximo día 9 para tratar el tema del emplazamiento de estaciones para el suministro de combustible, manifestó que no estaba en su mano conceder los solares municipales para este servicio, ya que primero tendría que declararlos válidos la Delegación de Industria; «no voy a meter junto a unas viviendas quinientas bombonas de butano, con el peligro que ello representa».