Madrid y Joventut se enfrentan por primera vez en Copa de Europa

El baloncesto español es el único que tiene dos equipos entre los seis que han llegado a la fase final de la Copa de Europa. El hecho resulta paradójico si tenemos en cuenta que la selección española perdió la categoría en el último campeonato europeo. Real Madrid y, Joventut se van a enfrentar esta tarde, a las siete, en el Pabellón y con televisión en directo.

Es la primera vez en la historia que lo hacen en. esta competición también será la última -al margen de esta temporada-, pues a partir de ahora el campeón continental no tendrá derecho a participar en la siguiente edición. Hay una gran expectación ante este choque y, pese a la pequeña pantalla, el Pabellón registrará un llenó de gala.Bosna de Sarajevo (Yugoslavia), Olimpiakos SK de El Pireo (Grecia), Joventut de Badalona (España), Emerson de Varese (Italia), Maccabi de Tel-Aviv (Israel) y Real Madrid (España) son los seis equipos que jugando todos contra todos, en sistema de Liga normal -dos puntos cada victoria sin tener en cuenta la diferencia-, darán los finalistas, que serán el primer y segundo clasificado. Ambos jugarán la final el 5 de abril en Grenoble.

El acaparamiento de jugadores por parte de los poderosos del baloncesto español hace que, pese a que la selección esté en segunda categoría, dos clubs españoles se encuentren entre los seis, teóricamente, mejores de Europa. Y más curioso resulta aún que Madrid y Joventut tienen en sus filas la casi totalidad de los hombres que componen el equipo español. Esto, sin embargo, no deja de ser un dato más para afirmar que el de esta tarde será un choque de alto nivel.

El partido toma características especiales por ser la primera vez que Madrid y Joventut se enfrentan en este torneo. El Madrid tiene unajustificada leyenda de que es «otro» en Copa de Europa, y aunque no se puede decir lo mismo del Joventut ahí está su triunfo de la primera jornada frente al Emerson, equipo que siempre creó problemas al Madrid, incluso en el mismo Pabellón. El único precedente que hay de este partido fue el que ambos jugaron en el Torneo de Navidad, pero evidentemente el tema es bien distinto, porque lo que está en juego no es nada amistoso, sino un título continental al que los dos equipos aspiran.

Se puede decir sin temor a exagerar que la expectación es inusitada. El Madrid, como actual campeón, querrá sentar cátedra, y el Joventut no estará ni mucho menos dispuesto a ser humillado por su gran rival. Se habla de lesión de Prada y de indisposición de Filbá y Miller. Hay que creerlo, pero no es la primera vez que forma parte de la estrategia de unos y otros. No parece ser así en esta ocasión, y entonces está claro que el más perjudicado es el conjunto de Antonio Serra, más corto de banquillo y, además, fuera de casa.

También hay expectación en tomo a los árbitros. Por un lado, en el Torneo de Navidad fue motivo de tantas polémicas. Por otro, resulta que el que actuará esta tarde de principal está considerado como el número uno. Se trata de David Turner, colegiado mimado de la FIBA, con excelentes cualidades y con dotes de gran AGitro, con el problema de que le gusta ser protagonista cuando la mejor virtud de un árbitro es pasar inadvertido para todos, fotógrafos incluidos. Al británico le ayudará en su misión el belga Ferdinand Francoeur, que con toda seguridad tendrá que sometarse al criterio del principal, muy absorbente en la cancha.

Gran acontecimiento, por tanto, en el Pabellón, donde no es nada probable que el Joventut sorprenda al Madrid, porque los blancos son poco menos que invencibles en su cancha. Un pabellón totalmente abarrotado y unos cuantos millones de telespectadores serán testigos de cuarenta minutos de juego que se presentan realmente apasionantes.