Ex brigada de la Guardia Civil asesinado en Guipúzcoa
Heliodoro Arriaga Ciaurriz, vigilante de la empresa metalúrgica Sacem, ex brigada de la Guardia Civil, resultó muerto a primera hora de la mañana de ayer como consecuencia de los disparos que efectuaron contra él varios desconocidos. El señor Arriaga acababa de abandonar su domicilio en la localidad guipuzcoana de Villabona y se encontraba abriendo la puerta de su automóvil, sobre las siete y cuarto, cuando recibió los disparos que le causaron la muerte casi instantánea.
Los autores del hecho fueron, al parecer, varias personas, aunque se desconoce el número y su aspecto por no existir ningún testigo presencial. Los disparos contra el señor Arriaga fueron efectuados a muy corta distancia. Seis balas alcanzaron su cuerpo, interesando el corazón, el tórax, el vientre, la barbilla y una pierna. Varios vecinos que se asomaron a las ventanas al escuchar las detonaciones sólo llegaron a ver el cuerpo sin vida del señor Arriaga, tendido sobre un charco de sangre, junto a su automóvil, un Simca-1200. Su esposa fue la primera persona en acercarse, aunque no pudo hacer otra cosa que comprobar la muerte de Heliodoro Arriaga.Se supone que los autores del atentado se dieron a la fuga en algún vehículo que les estaba esperando en las proximidades del lugar, pero no se dispone de ninguna información exacta sobre este extremo. La Guardia Civil del cuartelillo de Villabona montó nada más conocerse la noticia un amplio dispositivo, de controles de carreteras, sin conseguir ningún resultado inmediato. En el lugar de los hechos se han podido encontrar siete casquillos de bala, calibre nueve milímetros Parabellum, marcas FN y Geco. Esta última es la munición habitualmente utilizada por ETA, aunque hasta el momento nadie se ha responsabilizado formalmente del atentado.
El señor Arriaga había formado parte de la Guardia Civil hasta haIce trece años, alcanzando el grado de brigada. Contaba sesenta años de edad. Después de haber abandonado el cuerpo contrajo matrimonio con Nativididad Arregui y se trasladó a Villabona, donde trabajaba como portero de la empresa Sacem, dedicada a la fabricación de máquinas herramientas. Era natural de Viana (Navarra) y, al parecer, nunca había estado destinado en Guipúzcoa mientras perteneció a las fuerzas de seguridad. Sus compañeros de trabajo en Sacem han declarado que no tenían noticias de que Heliodoro Arriaga hubiera sido amenazado.
