Sanción ejemplar

Los nuevos y graves incidentes registrados en el campo jiennense de la Victoria durante el partido Jaén-Betis vienen a demostrar que el salvajismo futbolístico necesita más que vallas. Las imágenes que ofreció ayer televisión no pudieron ser más expresivas. El agarrón a Del Pozo fue elocuente y el penalti consiguiente, justo.Ni la tensión de un partido de rivalidad -ni que supusiese el empate a un minuto del final, ni nada- justifica acciones así. Ni siquiera si el árbitro se hubiese equivocado. El fútbol espectáculo, el de ganar al precio que sea, ha llegado a unos límites -continúa en ellos- intolerables. La sanción debe ser ejemplar.

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