TVE y el Opus Dei
En la página de sociedad del número correspondiente al día 4 de octubre decían ustedes que el lunes anterior habían recibido en la redacción «numerosas llamadas de sorpresa y protesta» ante la repentina emisión de un programa sobre el Opus Dei, que presentaba Covadonga O'Shea. Yo también reaccioné aunque ni tan pronto ni en la línea de sus lectores. Me alegro de que haya diversidad de opiniones, y por eso le cuento la mía. A la mañana siguiente escribí una carta al director de programación de TVE felicitándolo sinceramente por el extraordinario reportaje que habían ofrecido la víspera.
He de reconocer que yo también le reprochaba una cosa, en esa carta a la que me he referido. Le decía que por no haber avisado con tiempo de tal programa, me perdí la primera parte de esa filmación que tan buen sabor me dejó en la boca aquella noche de primeros de octubre: yo y algunas de mis amistades estábamos necesitando algo de ese estilo, y, mira por dónde, no llegó sin esperarlo.
Entiendo, y me gusta, que no to dos los programas de TVE hayan de agradar a todos los españoles. A mí, en concreto, una buena parte de ellos no llegan a gustar me ni poco ni mucho. Pero aquél del lunes por la noche, ése que molestó algunos de sus lectores -a los que quiero y respeto como conciudadanos que somos- ése, ya le digo, señor director, me pareció extraor dinarlo.
Madrid
