Encinas y Fontán, candidatos oficiales a la presidencia del Rayo

Cuando apenas faltaban unos minutos para que se cerrase el plazo de admisión de candidaturas a la presidencia del Rayo -el pasado lunes, a las nueve-, los dos únicos precandidatos, Francisco Encinas y Francisco Fontán, hicieron acto de presencia en las dependencias rayistas, con la documentación necesaria en regla. No se llegó, pues, al consenso que buscaba Marcelino Gil -a quien alguien ha llamado el «Saporta» vallecano- y ahora estos dos hombres han comenzado ya oficialmente su campaña electoral, que culminará el próximo día 12 de julio, fecha de las elecciones. Se espera fuerte abstención por la fecha escogida.

A Francisco Encinas se le cataloga como la oposición a Marcelino Gil y a los úItimos diecinueve años de gestión en el club, esencialmente en lo que se refiere a la cuestión administrativa. Tiene 34 años, es industrial, director de empresa, y representa aires innovadores. Ha afirmado que los únicos que han llevado al equipo a Primera han sido los jugadores, pero que la directiva -su labor- ha sido mala. Si resulta elegido, ninguno de los actuales miembros de la junta directiva formará parte de la suya. Sobre su personalidad hubo en su día muchas versiones; se dijo que era ex policía, concejal del Ayuntamiento, que debía dinero al club, circunstancias todas que fueron desmentidas. Pretende crear una mayor afición y acabar con la gestión anterior, que ha llevado al club a un déficit de 38 millones.En cuanto a Francisco Fontán se le ha catalogado como el candidato continuista. Tiene 38 años, es oficial industrial y propietario de una gestora. Fundador de la peña «FeIines». Se le ha tachado de «hombre de paja» de Marcelino Gil, circunstancia que ha negado sistemáticamente en todas sus manifestaciones, aunque sí ha admitido ser amigo del anterior presidente y de casi todos los directivos de la entidad. Lo cierto es que cuenta con el apoyo del dimitido presidente. Afirma que ha habido una buena labor, en algunos casos, de la directiva rayista, que sacó al equipo de Vallehermoso, donde estaba prácticamente hundido, y que le ha llevado a Primera. Asegura que mantendrá las cosas positivas hechas hasta ahora y que reformará con tranquilidad las que estén mal.

En definitiva, 2.592 socios con antigüedad de cuatro años son los encargados de elegir al futuro presidente rayista. Un número escaso, pero que representará los intereses de los 6.000 de la entidad, aunque la abstención será nota dominante en estas elecciones. Un portavoz rayista aseguró ayer que si vota el 50% sería un éxito. Todo un síntoma.