Conato de escándalo en la prueba de Estoril

Un auténtico escándalo pudo haberse producido en el circuito portugués de Estoril al término de la carrera puntuable para el Campeonato de Europa de turismos. La actuación del director de competición de Chrysler España, pretendiendo que la organización dejase fuera de carrera a todos los pilotos españoles que habían conseguido terminarla -con el solo objeto de que éstos no sumaran más puntos para el campeonato nacional-, produjo un escándalo al final de la carrera que pudo haber tenido feas consecuencias.Todo el incidente -nació cuando los vehículos oficiales de Clirysler tuvieron que abandonar por averías mecánicas. Quedaron sólo en carrera los Seat de Juncosa-Babler y Durán-Sanjurjo-Rasilla, estos últimos con la caja de cambios prácticamente inutilizada, al no funcionar nada más que la quinta velocidad y utilizando el freno de mano como único freno. Al terminar la carrera el director de competición de la fábrica de Villaverde pretendió que la organización excluyese a todos los pilotos españoles, argumentando que éstos no habían cumplido la distancia mínima que exige el reglamento.

Finalmente los organizadores rechazaron la reclamación, dando por buena la clasificación obtenida por los españoles.