Las centrales valoran positivamente los encierros de comités
Varios miles de representantes sindicales de toda España secundaron ayer la segunda y última jornada de encierros de comités de empresa, convocada por CCOO y UGT, en apoyo del texto de la ponencia del proyecto de ley de Acción Sindical que se discute en las Cortes. La ausencia de incidentes de relieve fue la tónica de esta protesta generalizada, que ha sido valorada muy positivamente -en un comunicado con junto-, por las dos centrales que habían hecho el llamamiento.En numerosos centros de trabajo se realizaron asambleas informativas, y las ejecutivas provinciales de CCOO y UGT procedieron a encierros en los locales de la AISS en sus respectivas ciudades de forma generalizada. En Madrid, en el edificio de la AISS del paseo del Prado, se concentraron alrededor de 2.000 delegados de la construcción de CCOO, entre los que se encontraban varios que habían acudido desde Aranjuez a pie para dar mayor relieve a su protesta.
Como en la jornada anterior, ayer la Policía Armada procedió a desalojar numerosas empresas en respuesta a la solicitud de sus directivos a los gobiernos civiles. La central de descuento de Banesto, de Zaragoza, según fuentes oficiales, presentó una denuncia contra varios de sus trabajadores que se habían negado a sus requerimientos de que abandonaran las dependencias de la entidad en que se encontraban encerrados.
Cataluña, Euskadi, Madrid, Valencia y Sevilla, registraron los mayores índices de participación.
«La respuesta dada por las secciones sindicales y comités de empresas al llamamiento conjunto hecho por UGT y CCOO -manifiestan ambas centrales en un balance conjunto-, y muy especialmente la acción que han llevado a cabo sectores que pretenden marginar la ley, como son los de Administración pública y otros, muestran claramente la necesidad de que el Pleno de las Cortes corrija el proyecto de ley de Acción Sindical en los aspectos que CCOO y UGT han planteado en, esta convocatoria». Finalmente, critican la acción de la patronal y advierten que las sanciones a estas jornadas encontrarían la decidida respuesta de los sindicatos.
