Los cadáveres de los dos policías serán trasladados hoy a España

Los dos cadáveres encontrados el pasado lunes en la playa de Anglet corresponden a los policías españoles desaparecidos el 14 de abril del pasado año en Hendaya, según el reconocimiento hecho, por sus padres, ante el juez de Bayona. El estado de momificación de los cuerpos ha obligado a que el reconocimiento se efectúe prácticamente en base a su vestimenta. Concretamente el padre de González Ituero ha manifestado que reconocía las ropas de su hijo porque las había comprado en su compañía poco antes de la desaparición. Hoy los cadáveres serán trasladados a España.

Pese a la identificación familiar, las pruebas definitivas deben ser aportadas por la autopsia, cuyo resultado oficial no se había hecho público todavía a las nueve de la noche de ayer.

En el rastreo llevado a cabo por la policía judicial de Burdeos, encargada especialmente del caso, fue encontrada ayer una mano que por la acción del tiempo se había desprendido de uno de los cadáveres. Esto permitirá obtener huellas digitales de uno de ellos, y certificar con exactitud su identidad.

El análisis radiológico efectuado en el laboratorio Domerc-Elizagaray ha confirmado, por otra parte, que, en efecto, los dos hombres murieron por un disparo en la nuca efectuado con una pistola de calibre 7,65, que no se corresponde con las armas más habitualmente empleadas por la organización ETA.

La policía francesa está tratando de reconstruir los hechos a base de interrogatorios efectuados a los jóvenes que encontraron los dos cadáveres y a todos los vecinos del lugar. Asimismo ha rastreado intensamente la zona en busca de alguna pista.

A estas alturas, solamente queda por conocer el resultado oficial de la autopsia, que determine con exactitud el tiempo que los dos cadáveres llevaban enterrados, resultado que, al parecer, no se hará público.