El Tour, nuevamente dominado por el ciclismo belga

Con Van Impe, tercero en 1971 y 1975, cuarto en 1972 y quinto en 1974, ha vuelto la racha belga que inició el campeonísimo Merckx en 1969 y que sólo interrumpieron Ocaña, en 1973, y Thevenet, en 1975. Zoetemelk, por su parte, se ha vuelto a conformar con la segunda plaza, como en 1969 y 1971, aunque ha superado sus cuartos puestos de 1973 y 1975, o el quinto de 1972.El Tour, indudablemente, se decidió en la decimocuarta etapa, Saint Gaudens-Saint Lary Soulan, cuando Van Impe dio su estocada definitiva. En efecto, para ganar su primer Tour el pequeño escalador belga tuvo que hacer por primera vez en su carrera un esfuerzo en solitario de 72 kilómetros. Ese día, en cinco horas, ganó el Tour. La historia de cómo lo hizo, sin embargo, no fue muy simple. En realidad no podía serlo al tratarse de algo tan importante.

Van Impe nunca había vencido en una cumbre con tanta ventaja como lo hizo en Pla d'Adet. Ese día. quizá lo recuerden, sólo 52 corredores llegaron dentro del control. Sólo gracias a la benevolencia de los comisarios y a la aplicación del reglamento sin rigurosidad, el belga no dejó diezmado el Tour.

Tras el Tour 76, el palmarés español en la ronda francesa es el siguiente: 48 etapas ganadas, luego de las dos de Lasa y Viejo. 4 triunfos por equipos, a cargo del Kas, que ha vuelto a demostrar su seriedad. Se mantiene también el triunfo por naciones de 1968, recordado, pero no repetido, naturalmente, desde que llegaron las casas comerciales. 2 triunfos individuales, los de Bahamontes, en 1959, y Ocaña, en 1973. 15 premios de la montaña, con el récord de seis. Absoluto en el Tour para el «águila» de Toledo, a quien por aquí aún se recuerda como el mejor escalador de todos los tiempos. Por otro lado, en siete ocasiones los espanoles se han clasificado entre los tres primeros de la general individual y Ocaña posee la plusmarca de triunfos de etapas, con nueve: una en 1970, dos en 1971 y seis en 1973, el año, de su triunfo absoluto. El de Priego ha corrido con el actual siete Tours. En victorias de etapas le sigue Bahamontes, que en diez ediciones logró siete.

En el Tour actual se han dado premios a la combatividad y también a la mejor escapada de cada jornada. Aparte, también otros un tanto folklóricos y caprichosos a la elegancia y a la amabilidad. Naturalmente, ningún francés se ha quedado sin ellos. En cuanto a uno final que se ha concedido a la superescapada del Tour, no hubo duda en dárselo a, Viejo, por su enorme hazaña en solitario entre Mont-Genevre y Manosque.

En esta ocasión no estuvo en la jornada final del Tour el presidente de la República, Giscard d'Estaing, pero en su lugar asistió el presidente del Senado, Alain Poher. Con él, desde luego, casi el «tout» París.

En el podium de vencedores individuales, además de los cuatro primeros de la general y de Maertens, maillot verde, o Bellini, mejor escalador, estuvo Martínez Heredia como primer neoprofesional clasificado. El mismo, con todo el Kas, también subió a recibir el premio por equipos, que el cuadro vitoriano ganó con 7,11 minutos de margen sobre el Gan. Los «points chauds» fueron para Mintkiewicz, del equipo de Van Impe. Este, por cierto, con su triunfo, ha conseguido el apartamento que la urbanización de Merlin Plage ofrecía al vencedor del Tour. En la meta, enseñaba la llave. Naturalmente, no hacía más que repetir su alegría y su incredulidad por el triunfo.