_
_
_
_

En Las Ventas, una seria corrida de Palha

Esta corrida de Palha se dijo que venía para la Beneficencia. Claro que esa corrida es para las figuras y estos toros de Palha han sido para tres toreros modestos que sólo por salir a matar la dura y astifina corrida ya tenían mérito.El Inclusero tardó en centrarse con el noble primer toro pero brillarían unos naturales terndidos y armoniosos en una serie, que levantó un clamor, y unos ayudados por alto, cargada la suerte de gran sabor. Indudablemente el toro tenía mas faena pero hay que tener en cuenta que el alicantino se vestía de luces por primera vez en la temporada y el toro, de gran trapío, se le hubiera dejado ir más de una figura. Por tardar en centrarse alargó en demasía la faena y por eso vino el aviso, pero también la oreja. El cuarto, un torazo con 48 kilos, gran trapío y desarrolladas defensas, quitaba el hipo a cualquiera. El Inclusero estuvo muy confiado y mató pésimamente, escuchó dos avisos y poco faltó para que el toro volviera vivo a los corrales. Valentísimo toda la tarde estuvo Ricardo de Fabra. En su primero, que llegó difícil a la muleta, estuvo breve y poco lucido. El quinto, protestado por cojo, fue magníficamente banderilleado por esos dos grandes toreros que son Eliseo Capilla y Paco Honrubia, más espectacular Capilla, que clavó un portentoso par de dentro a fuera dando todas las ventajas al toro, y con más arte Honrubia, que llegó pausadamente a la cara del toro y salió del encuentro andando con torería. Después Ricardo de Fabra realizó una faena vibrante sobre la mano derecha. Al iniciar un pase de pecho fue cogido aparatosamente. Maltrecho, con luxación de hombro, a pesar de su pundonor, no pudo matar al toro. Acabó El Inclusero de un descabello. A Fabra se le concedió una oreja. Por dos veces recorrieron el ruedo sus peones, la segunda vez como premio a su estupenda actuación.

En Las Ventas se celebró la corrida organizada por el Montepío de Veterinarios

Se lidiaron seis toros de Palha para el Inclusero, Ricardo de Fabra y Juan José.El Inclusero, una buena serie denaturales, estocada delantera perdiendo la muleta y descabello, un aviso y oreja. Desconfiado en el cuarto, mató muy mal, dos avisos y pitos. Fabra, valiente en su primero, media tendida, pinchazo y descabello, silencio. Con el quinto, faena valentísima sobre la derecha, estocada tendida y dos descabellos. Acaba el Inclusero de un descabello a! dolerse Fabra del hombro, orejay un aviso. Juan José, muy deslucido, estocada bajísima al tercero, cinco pinchazos y descabello al último. Silencio en los dos. Los toros muy bien presentados, de aparatosas defensas, resultaron en general mansos. Muy nobles en la muleta, primero y quinto.

Con el peor lote estuvo muy deslucido Juan José, que en el sexto dio las mejores verónicas de la tarde. Pero con la muleta estuvo muy desconfiado en el tercero y anodino con el sexto, que fue el único toro de la tarde al que le faltaron las fuerzas y, curiosamente, era el más descarado de cuerna, en una tarde en que abundaron las cornamentas aparatosas, por lo astifino y veleto. Prescindiendo de detalles más o menos técnicos, estos hombres, matadores y subalternos, merecen el aplauso y el respeto por medirse con estos toros.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_