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MotoGP y su próxima evolución: menos velocidad punta y freno a los apéndices aerodinámicos

El Mundial del motociclismo sienta las bases de su futuro reglamento técnico para 2027 con motores de 850cc

Jorge Martín (i) y Francesco Bagnaia, durante el Gran Premio de España.
Jorge Martín (i) y Francesco Bagnaia, durante el Gran Premio de España.José Manuel Vidal (EFE)

MotoGP vive uno de los mejores momentos de su historia, como demuestra el espectáculo vivido dentro y fuera de la pista en el recién celebrado GP de España y la igualdad sin precedentes de las carreras en los últimos años. Todo ello ha contribuido a la venta multimillonaria del campeonato –a cambio de 4.200 millones de euros– a Liberty Media, propietaria de la Fórmula 1, una operación pendiente de completarse todavía. En pleno subidón del certamen, la Comisión de Grandes Premios, el ente regulador de la categoría, ha anunciado este lunes el acuerdo que sienta las bases de la competición en el futuro.

A partir de 2027, las motos de la categoría reina serán menos potentes y verán reducida la incidencia de los apéndices, así como de la electrónica. Un aspecto, especialmente el que hace referencia a la aerodinámica, desarrollado hasta límites insospechados por los ingenieros en esta última época en la que Ducati ha emergido como la moto de referencia. “Buscamos que las motos sean de nuevo más parecidas a las de la calle”, apuntaba Carlos Ezpeleta, director deportivo de Dorna, justo después de la venta de la empresa hace unas semanas. “Para los pilotos. Para el deporte. Para el espectáculo”, rezaba el principal reclamo de MotoGP tras el anuncio.

La primera decisión de calado de los órganos que rigen la categoría reina del motociclismo ha sido la de reducir la cilindrada de los motores, que pasará de los 1.000cc actuales a 850cc. Esto permitirá reducir la velocidad punta, mejorar la seguridad de los pilotos e incrementar el rango de kilómetros de las máquinas. Otros elementos importantes del primer esbozo del reglamento oficial de cara a 2027 incluyen la reducción del tamaño y el número de elementos aerodinámicos de las motos, además de la prohibición total de los dispositivos de altura y salida, dos ayudas electrónicas que facilitaban la aceleración de los pilotos al apagarse el semáforo y en las largas rectas. El empequeñecimiento de las alas y la eliminación de la capacidad de bajar la altura de la moto en marcha buscan dar más armas a los pilotos a la hora de adelantar a sus rivales y poder influir más con su tacto a la hora de dar gas.

“Se irá más lento, eso seguro. También se reducirá el consumo. Más o menos habrá una reducción de potencia del 15%, y la reducción en aerodinámica es igualmente lógica. A menor velocidad, menor fuerza generada, y por lo tanto se puede reducir la superficie de los apéndices, el downforce, etcétera”, analiza para EL PAÍS Ramón Forcada, uno de los técnicos más experimentados del paddock. “La eliminación del dispositivo de salida, por ejemplo, permite abaratar costes y elimina una ventaja que, en todo caso, todo el mundo tenía. Las motos serán menos físicas, ya que hay una rebaja del peso en cuatro kilos (153 es el nuevo tope). Todo va en la línea correcta, en mi opinión, de mejorar la seguridad, ya que no tendrás fuerzas tan extremas ni velocidades tan altas. Además, puede generar mayor espectáculo, ya que no necesitarás ser tan especialista para pilotar la moto y controlar todos sus elementos, devolviendo importancia al talento del piloto”, añade el que fuera ingeniero jefe de Jorge Lorenzo en Yamaha.

El reglamento de la futura MotoGP confirma también la introducción de combustibles 100% renovables a partir de 2027, aumentando la actual mezcla que incluye un 40% de gasolina de procedencia no fósil. La capacidad del tanque se verá reducida de los 22 a los 20 litros, otra medida que va en la línea de crear máquinas más eficientes y capaces de reducir notablemente la huella de carbono del campeonato entero. Los equipos, en este sentido, podrán usar tan solo seis motores por temporada y tendrán otras restricciones de piezas, por ejemplo el número de cambios de marcha (16).

Un último punto notable de las medidas anunciadas incide en la apuesta por la igualdad competitiva. Con el nuevo sistema, todas las motos de la parrilla deberán compartir públicamente sus datos de seguimiento a través del GPS después de cada sesión. Esto permitirá a los equipos más discretos y a los pilotos más lentos estudiar dónde los mejores están marcando la diferencia en cada circuito de manera casi inmediata. El sistema de concesiones, diseñado para dar más oportunidades de test y entrenamiento a las marcas que persiguen a los líderes del certamen, se mantendrá intacto.

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