Luis de la Fuente se desentiende de las maniobras de la federación para exculpar a Rubiales
El exsubdirector de Comunicación cuenta que el expresidente de la RFEF dictó las respuestas de una trabajadora para que se incluyeran en el expediente interno que lo exculpó
Luis de la Fuente, actual entrenador de la selección española masculina de fútbol, se ha desentendido este martes de las maniobras que se urdieron en el seno de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para tratar de minimizar el beso que Luis Rubiales propinó a la jugadora Jennifer Hermoso tras la final del mundial femenino de 2023. Citado como testigo en el juicio que acoge la Audiencia Nacional, el técnico ha asegurado que no se enteró de cómo se elaboró un comunicado para justificar la actuación del máximo responsable del organismo; y que, además, no supo qué asuntos se trataron en una reunión celebrada en la sede de la federación para elaborar un informe interno del área de Integridad, con el que se acabó exculpando a Rubiales.
—¿Recuerda si en el avión escuchó algo de un comunicado? —le ha preguntado la fiscal Marta Durántez al seleccionador, en referencia al vuelo de vuelta España tras la final, donde él estaba presente.
—Rotundamente, no.
En esa línea, De la Fuente también se ha manifestado cuando se le ha preguntado por una reunión que se celebró en el despacho del presidente tras estallar el escándalo, una vez habían vuelto ya todos desde Australia. A esa cita se llamó a Patricia Pérez, jefa de prensa del equipo femenino, para tomarle declaración con el objetivo de incorporar sus declaraciones en un informe interno del área de Integridad. Patricia Pérez aseguró que el entrenador estaba allí, mientras Rubiales dictaba parte de las respuestas de ella.
—¿Estuvo presente en la reunión? —ha incidido la fiscal.
—Yo tenía prevista una reunión con el presidente, 10 días antes de una convocatoria [del equipo masculino]. Estuve en el despacho colindante. Había un despacho más pequeño, y yo estaba allí para atenderme cuando me podía atender. Rubiales estaba en otros asuntos. Cuando podía, venía y hablaba de lo nuestro. Yo no escuché palabra [de la declaración de Patricia Pérez].
📺 TV EN DIRECTO | “Yo no vengo para hablar de este tema”, contesta Luis de la Fuente a una pregunta de la fiscal sobre su presencia en la Asamblea. El juez reprueba al seleccionador, pero instantes después no admite como relevante su aplauso a Rubiales https://t.co/ms3eyNkPRE pic.twitter.com/SRmVkth7tO
— EL PAÍS (@el_pais) February 4, 2025
Además de a De la Fuente, el tribunal ha escuchado este martes la versión de otros cuatro testigos. Miguel García Caba, ex vicesecretario general de la RFEF y exdirector del área de Integridad; y Pablo García Cuervo, exdirector de Comunicación, han tratado de justificar su actuación durante aquellas jornadas. El primero era el encargado de elaborar el informe interno abierto que exoneró al mandatario federativo al concluir que el beso era un tema “sin importancia” y “anecdótico”, para el que no se contó con el testimonio de Hermoso: “Yo le pido que declare, ella dice que no, que lo hable con sus abogados, con sus agentes [...] Si hubiera tenido el testimonio de Hermoso, le garantizo que el informe hubiera sido rotundamente lo contrario de lo que disponía”, ha insistido García Caba.
El exdirector del área de Integridad ha justificado que ese informe se confeccionó en “apenas un día y medio”, y ha admitido que no estuvo presente en la toma de declaración de Patricia Pérez, la jefa de prensa del equipo femenino, que el lunes aseguró que la cúpula de la RFEF le preparó una “encerrona”. Pérez contó al tribunal que le citaron en la sede de la federación, donde le esperaban Rubiales en su despacho y otras siete personas, después de haberle dado ya las preguntas y respuestas que tenía que decir para incorporarlas a dicho expediente. “En esas respuestas [con las que no estaba de acuerdo], ponían cosas como que yo había hablado con Jenni Hermoso y que ella le había quitado hierro al asunto, cuando yo no había tenido ningún tipo de conversación con Jenni Hermoso”, recalcó Pérez, antes de rememorar más circunstancias de aquella reunión: “El presidente dijo que por qué no leían mis respuestas en alto. Y, entonces, Enrique Yunta va transcribiendo lo que le va dictando el presidente, que creía que debíamos incluir en mi declaración”.
Enrique Yunta, entonces subdirector de Comunicación y que ha declarado también este martes como testigo, ha respaldado la historia de Patricia Pérez. Además de situar allí a Luis de la Fuente, Yunta ha apuntado directamente a Rubiales por intervenir para forzar las respuestas de la jefa de prensa que se iban a incorporar al expediente de Integridad. ¿Quién le iba diciendo las respuestas? El presidente “interpelaba” y “Patricia decía que no podía ser así”. ¿Quién le iba diciendo los posibles cambios era el expresidente? “Sí, era el presidente”. ¿Usted estaba con el ordenador realizando los cambios oportunos? “Sí”.
García Cuervo ha ido aún más allá y ha atacado a la jugadora, a la que considera responsable de su despido tras el escándalo internacional. El exdirector de Comunicación ha admitido que elaboró la nota de prensa que incluía declaraciones de Hermoso para justificar el beso. Según ha dicho, la confeccionó sin hablar con ella y basándose en declaraciones que ella había hecho en la cadena de radio Cope. “Rubiales me habla de la conveniencia de sacar un comunicado con declaraciones de Hermoso. Rubiales lo ve antes de enseñárselo a Hermoso”, ha dicho en un primer momento. “Lo redacté con la supervisión del presidente”, ha matizado después, cuando la fiscal Marta Durántez ha evidenciado que se contradecía con lo que declaró durante la instrucción, cuando contó que lo elaboró con Rubiales.
García Cuervo ha asegurado que hicieron bajar a Hermoso del autobús cuando iban hacia al aeropuerto y se ha justificado en que, aunque con “desgana”, ella les dio el “ok” para enviar ese comunicado a los medios: “Queríamos tratar de parar esa bola de nieve”. Además, ha afirmado que después ya no quiso hablar más con ella por si cambiaba de versión: “Yo digo que no voy a hablar con Jenni Hermoso porque no me fío y porque puede cambiar de opinión. Y yo ya tenía su ok […] Yo considero que Hermoso es una persona bastante influenciable y bastante manipulable”. Durante su interrogatorio, el magistrado ha llegado a llamarle la atención por su falta de respeto hacia los abogados de las acusaciones: “Quiero saber las cosas con claridad, no con chulería”, le ha dicho el juez.
El juez del caso Rubiales estalla contra el exdirector de Comunicación de la RFEF: "¡Basta ya! Quiero saber las cosas con claridad, no con chulería" https://t.co/M5o2vhVyGe pic.twitter.com/tJqtRYT3n5
— Cadena SER (@La_SER) February 4, 2025
La Fiscalía pide dos años y medio de cárcel para Rubiales por un delito de agresión sexual por el beso “no consentido” a Hermoso y por las presuntas coacciones que impulsó después para que la deportista justificara en público su actuación. En el banquillo se sientan otras tres personas, que se enfrentan a una petición de un año y medio de prisión por participar en esas supuestas presiones: Albert Luque, exdirector de la selección masculina y exfutbolista; Jorge Vilda, exentrenador de la selección femenina; y Rubén Rivera, exresponsable de marketing de la RFEF.
Este martes, la segunda sesión del juicio ha acabado sobre las 13.00. La vista seguirá este miércoles con los interrogatorios de otros cinco testigos: entre ellos, los de la futbolista María Isabel Rodríguez, alias Misa; Rafael del Amo, exvicepresidente de la RFEF; y Rafael Hermoso, hermano de Jennifer Hermoso. Las defensas tratarán de buscar contradicciones en la declaración del familiar de la jugadora, según explican fuentes jurídicas.
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