Trossard y Odegaard elevan al Arsenal en la demolición del Chelsea
El belga abre el marcador una vez más y el noruego da una exhibición de asistencias en el 5-0 del derby de Londres en una Premier desatada
El Arsenal levantó el vuelo sobre la carcasa del Chelsea. Con una goleada inapelable, 5-0, el equipo del norte de Londres volvió a encaramarse al liderato de la Premier con 77 puntos, cuatro más que el Manchester City, que ha disputado dos partidos menos. La victoria en el derby restañó la herida de la eliminación de la Champions ante el Bayern y suavizó las tensas relaciones subterráneas entre Odegaard y Havertz, el ocho y el nueve de una plantilla que lima asperezas al tiempo que se esfuerza por ajustar piezas de un talento superlativo. Que Gabriel Jorginho, Jesús y Martinelli lo vieran sentados en el banquillo, es la prueba fehaciente. Ni el City se puede permitir semejante reserva.
Leandro Trossard fue el jugador que más se rebeló contra el dominio del Bayern en los cuartos perdidos de Champions, marcó el 0-1 ante el Wolverhampton este fin de semana, y abrió el marcador con el 1-0 que dobló el espinazo del Chelsea en el derby de Londres disputado este martes en el Etihad. El belga de los pómulos protuberantes y el gesto adusto de un oficial de pompas fúnebres, es el hombre que tira del Arsenal en la batalla final por el título de la Premier. Su tanto, a pase de Rice, entró como un estoque en el alma del equipo de Mauricio Pochettino, que llegó al partido agotado tras la semifinal de Copa disputada el sábado ante el City, derrota tras una sucesión interminable de dolorosos golpes. Los blues seguirán fuera de la Champions la temporada que viene, sumidos en la crisis existencial de la que no escapan desde que el Gobierno británico le expropió el club al oligarca ruso Roman Abramovich.
Sumido en el caos, el Chelsea solo cobró vida cuando salió de su campo y desplegó a Jackson, Enzo Fernández y Madueke cerca del área de Raya. En su propio terreno, sus defensas dieron un recital del desajuste. Sin necesidad de presionarlos al hombre, con tan solo bloquear la salida de Enzo Fernández, al Arsenal le bastó para llevar el desconcierto a la zaga que Disasi no lograba ordenar. El saldo de remates resultó abrumador: de 27 a favor del equipo local, siete a favor del Chelsea.
Ben White aprovechó un fuera de juego mal tirado para meter el 2-0 a la salida de un córner, y el resto fue rodar cuesta abajo. Odegaard acentuó la agonía de sus rivales con una actuación memorable. El exmadridista generó ocho oportunidades de gol, entre ellas dos pases en los que dejó a Havertz solo ante Petrovic, el portero. El alemán los desperdició. Pero el dique reventó definitivamente en el minuto 57 cuando Odegaard volvió a lanzar a su compañero en un contragolpe. Con la defensa adelantada y el partido roto, Havertz se metió entre Disasi y Badiashile y anotó el 3-0, prolegómeno del 4-0, también suyo, y de otro gol de White tras otra asistencia colosal de Odegaard.
La goleada certificó el nivel de la plantilla del Arsenal, la depresión del Chelsea, y el estado de ebullición de un campeonato que promete emociones fuertes hasta la última jornada, prevista para el 19 de mayo. Hoy (21:00 horas en DAZN) juega el Liverpool, el segundo clasificado, en Goodison Park. Mañana el City visita Brighton.
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