_
_
_
_

Por qué se marcan en la Eurocopa más goles desde fuera del área que nunca

Las primeras cinco jornadas del torneo, con una pelota que combina precisión y sorpresa, dejan una media de 0,7 tantos de lejos por encuentro, el doble de lo habitual

Shaqiri
El suizo Shaqiri marca al portero escocés Gunn desde fuera del área.Alex Grimm (Getty Images)
David Álvarez

Es martes, a dos días para el partido contra Italia, después de diez ya de concentración en Donaueschingen. Ha terminado el entrenamiento, pero Nico, Lamine, Fermín y Morata no se van del campo. Se divierten lanzando faltas por encima de la barrera mecanizada que se eleva con cada tiro. Hay risas. El balón de la Eurocopa, el Fussballliebe, tiene un punto que engancha. “Me gusta porque hace cosas extrañas para el portero y es más jodido de parar”, dice un futbolista de la selección española.

En juego, está deparando una Eurocopa de récord de goles desde fuera del área. El tirazo que se sacó desde 28,7 metros el danés Hjulmand el jueves en Fráncfort, y que resultó inalcanzable para Pickford, provocó dos cosas. Inglaterra, espesa y desnortada, vio cómo esa pelota que pegó en la base del palo y entró le birlaba la ventaja que había logrado solo 16 minutos antes (1-1). El tanto lejano tuvo también un efecto en los registros del torneo: con ese, se habían marcado 13 goles desde fuera del área en 17 partidos, y se superaban los 12 que se vieron en los 64 encuentros de todo el Mundial de Qatar, el último gran campeonato de selecciones.

Está siendo la Eurocopa del acierto de los francotiradores. Ya desde el primer gol: a los 10 minutos del partido inaugural, el Alemania-Escocia, Kroos encontró con una diagonal larga a Kimmich liberado en la banda derecha y el lateral avistó a Wirtz trotando hacia la frontal. Antes de cruzar la línea, chutó abajo y dobló la mano de Gunn. Entre la diana de Wirtz y la de Hjulmand no han dejado de repartirse premios a quienes prueban suerte desde lejos: 0,72 goles desde fuera del área por partido hasta el final de la jornada del jueves, según los registros de StatsBomb. Se trata de la Euro con más tantos lejanos al menos desde la de 1996, que es la primera de la que cuentan con datos.

El salto en el torneo de Alemania es formidable. En la edición pasada, por ejemplo, se macaron menos de la mitad, 0,35 por encuentro. La que más se le acerca, la de 2000, todavía se quedó lejos, con 0,42.

El salto no responde a un repentino apetito de los futbolistas por las aventuras periféricas, sino a un pico insólito de acierto. Esta edición del torneo es la segunda en la que menos se tira desde fuera del área, solo 9,8 veces por partido, frente a las 14,5 de 2008, cuando solo se registraron 0,19 aciertos por partido.

No se tira más, y tampoco se tira desde posiciones más favorables, o más despejadas de defensores. Los tiros lejanos de esta Eurocopa tienen una media de 0,09 goles esperados (xG), en línea con los que las defensas han permitido en Eurocopas anteriores. En la pasada, por ejemplo, el modelo de StatsBomb calculaba que esos disparos tenían aún más opciones de acabar en gol, 0,10 xG de media.

La diferencia es el acierto de los lanzadores, que ha experimentado una repentina explosión: meten el 7% de los tiros que intentan desde fuera del área, mucho más que en el resto de las Eurocopas. Es cierto que dos de los goles llegaron propiciados por rebotes en defensas —el de Gapko para Países Bajos contra Polonia y el de Danza para Eslovenia contra Dinamarca—, pero el salto parece significativo: la Euro que más se acerca es la pasada, con un 4%, pero todas las otras registraron aciertos de menos de la mitad, del 3% o menos. ¿Qué ha pasado?

El cambio más significativo, y común para todos, es la pelota, de la que los futbolistas destacan una mezcla de esa sorpresa mencionada en el campamento de España y de precisión. En Adidas, fabricante de la pelota, han recibido comentarios parecidos, según su responsable de producto y diseño, Sam Handy: “El balón ya dejado varios momentos memorables”, dice. “Se ha diseñado para mejorar la aerodinámica, la estabilidad y el control en larga distancia”. Los surcos en relieve de la superficie, probados en el túnel del viento, contribuyen, según el fabricante, a “otorgar la máxima precisión”. La pelota del Mundial de Qatar, de la misma factoría, favorecía a los guardametas, como explicó allí Ramsdale, de Inglaterra. Sus colegas solo vieron allí 12 goles desde fuera del área.

párrafo

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Sobre la firma

David Álvarez
Sigue la información del Real Madrid y la selección española en EL PAÍS, donde ha sido redactor jefe de la sección de Deportes. Ha cubierto los Juegos Olímpicos, el Mundial de fútbol y la Eurocopa. Antes trabajó en ABC, El Español, ADN, Telemadrid, y La Gaceta de los Negocios. Es licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra.
Tu comentario se publicará con nombre y apellido
Normas
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_