Eriksen, estable y despierto tras desplomarse durante el Dinamarca - Finlandia
El mediapunta danés se desmaya y es atendido de urgencia por los médicos en medio de un ambiente dramático
La sangre de todos los aficionados del fútbol se heló súbitamente cerca de las 18.40 de este sábado. Instantes antes del descanso del partido de la Eurocopa que enfrentaba a Dinamarca y Finlandia en Copenhague, el mediapunta danés Christian Eriksen, de 29 años, se desplomó sobre el césped. Sus compañeros de selección formaron un círculo alrededor de su capitán para impedir que las cámaras de televisión y los fotógrafos obtuviesen imágenes, mientras los médicos atendían al jugador de forma urgente en un clima de enorme tensión y dramatismo. Muchos de ellos rompieron a llorar, al igual que los aficionados en el estadio, mientras los sanitarios practicaban maniobras de reanimación al jugador sobre el terreno de juego. Antes había sido fundamental la intervención de su compañero Kjaer, al evitar que se ahogara con su lengua y ponerle en posición de recuperación.
Minutos después, el danés fue retirado en camilla, ya con los ojos abiertos, despierto y llevándose una mano a la cabeza. La UEFA suspendió el encuentro, con 0-0 en el marcador. La cita fue reanudada a las 20.30. Esa fue una de las opciones que propuso el organismo europeo. La otra, este domingo a las 12.00. Volvió el juego y ganó Finlandia por 0-1, y Dinamarca falló un penalti, pero el deporte había pasado a un segundo plano.
Las imágenes fueron dramáticas en el estadio, entre los futbolistas y entre los aficionados. Los médicos se llevaron a Eriksen en camilla para su traslado al hospital entre los aplausos de los hinchas de ambos países. Posteriormente, la UEFA confirmó que los médicos habían conseguido estabilizar al capitán danés, que permanecerá ingresado. Su agente aseguró que Eriksen se encontraba despierto y podía hablar, lo que puso fin a uno de los momentos más angustiosos que se han vivido en el fútbol en los últimos años. Los medios daneses informaron de que el futbolista había hablado con sus compañeros y les había pedido que volvieran a saltar al campo.
Casi dos horas después, el encuentro se reanudó con cinco minutos por disputar de la primera parte y todo el segundo tiempo, con el marcador 0-0. Dinamarca había dominado hasta entonces y Finlandia apenas había salido de su área. Pero en la reanudación, con los jugadores daneses visiblemente desconcentrados, los debutantes en la Eurocopa consiguieron dar la sorpresa y se llevaron el triunfo gracias a un gol de Pohjanpalo y el penalti detenido por Hradecki. En Dinamarca, la derrota duele menos después de haber sufrido un episodio que casi acaba en tragedia.
El mundo del fútbol se estremece cada vez que un jugador sufre un episodio como el que ha experimentado Christian Eriksen. Este mismo año, en la liga española se vivió un susto parecido cuando Moussa Dembélé se desmayó durante un entrenamiento con el Atlético y tuvo que ser trasladado rápidamente al hospital.
El recuerdo de Antonio Puerta, jugador del Sevilla que falleció de un infarto durante un partido de Liga ante el Getafe en 2007, aún se mantiene muy vivo en la memoria de los aficionados. En 2003, en otro partido internacional, se vivió otro terrible episodio. El camerunés Marc-Vivien Foé, de 28 años, falleció sobre el césped en el duelo de semifinales de la Copa Confederaciones contra Colombia. La autopsia determinó que el jugador sufría una malformación cardiaca.
Unas semanas después, en enero de 2004, Miklós Fehér, delantero del Benfica de 24 años, se desplomó durante un partido ante el Vitoria de Guimaraes y los médicos no lograron reanimarle sobre el césped.
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