El Barça vence con autoridad en Milán y se afianza en la clasificación

El Barcelona ganó en Milán (88-98) y conserva todas las opciones de estar entre los mejores, aunque un triple inverosímil de Tonut sobre la bocina, le deja por detrás en el basket average con el equipo italiano, una cuestión menor cuando se trata de ganar un partido, salvo que los dos equipos acaben empatados. De momento, los azulgranas están por delante. Tienen que jugar todavía ante el Fenerbahçe en Estambul y en casa frente al Baskonia. Una victoria le permite estar entre los ocho mejores al final de la Liga regular, porque ninguno de los que están por debajo del décimo puesto podría alcanzarle.

La actuación estelar de Darío Brizuela (27 puntos), que solo se salió un rato del partido por un golpe en la cabeza que le provocó una brecha, resultó decisiva dentro de una actuación coral, en una de las mejores versiones del equipo de Joan Peñarroya fuera de casa. Junto a él, Punter fue el complemento ideal con 25 puntos. El Barça anotó 14 triples y ese tiro exterior bien ejecutado le dio tranquilidad para mandar durante todo el partido. Parker, que comenzó muy bien, se fue diluyendo con el paso de los minutos, aunque eso no influyó demasiado en el transcurrir del partido, que siempre estuvo inclinado hacia el bando barcelonista.

Brizuela salió a la cancha con la mano caliente, y convertía en oro cada tiro a canasta. 5 de 8 en tiros de dos, los mismos números en triples, así que sus compañeros le buscaban, en un partido en el que también destacó la valentía de Dame Sarr, que jugó con una personalidad inusual para un chico de 18 años, que no podrá ir al Nike Hoop Summit, el partido anual entre los mejores jugadores de su edad, que se celebra en Portland. El Barcelona no le ha dado el permiso a la vista de que tiene la plantilla en precario y cada jugador que se encuentra en buenas condiciones es importante.

Pese a que, en el bando local, Mirotic ofreció también una versión sólida de sí mismo, sin demasiadas alharacas, pero con unos números muy serios —28 puntos y 9 rebotes—, no tuvo demasiada compañía en su equipo. Cada vez que Ettore Messina le daba un respiro en el banquillo, el Barcelona aprovechaba para estirar el marcador. Llegó a tener 20 puntos de diferencia a falta de seis minutos, pero el arreón final del equipo milanés maquilló el resultado. El triple de Tonut evitó la fiesta completa. Una canasta de dos puntos de Jabari Parker igualó el marcador del partido del Palau, quedaba un segundo, y el saque de banda a la desesperada del Emporio Armani fue de lado a lado, a las manos del jugador italiano, que realizó una maniobra en el aire para lanzar sin pensárselo y anotó.