Victoria al ralentí de España contra Montenegro en su estreno mundialista (30-25)

España no pudo tomarse ni un minuto libre en su estreno mundialista ante Montenegro, el rival con más miga de la primera fase pero al que todos daban por derrotado desde el inicio contra la subcampeona de Europa. Sin alardes, la selección no pudo quitarse de encima a los balcánicos hasta los instantes finales aunque siempre con la sensación de que el encuentro lo tenía cogido por la pechera. La producción primero en ataque de Branko Vujovic (seis goles sin fallo al inicio de la segunda mitad) y la crecida de su meta Nebojsa Simic tras la pausa (nueve paradas en la reanudación) no sirvieron más que para retrasar una claudicación cantada.

Victoria al ralentí en Cracovia de los muchachos de Jordi Ribera, que este sábado se cruzarán con Chile y el lunes, con Irán (ambos a las 20.30 y por Teledeporte), dos conjuntos de rango menor (los asiáticos derrotaron por la tarde a los sudamericanos 24-25) antes de que la cuesta se empine de verdad en la segunda ronda del torneo. Francia y, muy probablemente, Eslovenia y la anfitriona Polonia aparecerían en el horizonte.

El primer español que desperezó a la selección estaba bajo palos: Gonzalo Pérez de Vargas (MVP de la noche con 10 intervenciones). Sin necesidad de ninguna exhibición, el toledano dejó varias estiradas que le sirvieron a su equipo para dejar las primeras señales del debut, que arrancó con un 2-4 en contra. Ribera movió pronto el dispositivo defensivo y recurrió para el minuto cinco al sistema 5:1 con Álex Dujshebaev primero y luego Kauldi Odriozola en la posición de avanzados. Los efectos no fueron deslumbrantes, pero sí resultaron suficientes para que los Hispanos fueran tomando posiciones y pudieran estirar las piernas en algunas contras.

Ángel Fernández percutía desde el extremo izquierdo, Adrià Figueras en el pivote (tres tantos sin fallo ambos hasta el descanso), Odriozola aportaba tajo atrás y producción arriba (dos dianas), y así España se retiró a la pausa con una renta de tres arriba (15-12) que había sido de cuatro un rato antes.

La velada para España no pasó de esa diferencia de cuatro tantos hasta el último minuto del choque contra una Montenegro que, pese a sus pérdidas (18), no dejó de hacer la goma. La selección pudo romper el partido al inicio en la segunda parte, pero también cometió varias pérdidas seguidas en acciones muy francas y, de postre, se encontró con el ascenso de Simic. El marcador se estrujó en un 18-17 en el minuto 42.

Al instante, España cogió aire con un parcial de 3-0 gracias a un momento de superioridad y a que Montenegro retiraba al portero en ataque (21-17 en el 43), pero tampoco eso le bastó para quitarse de encima a un rival pegajoso. Su falta de finura en ataque no le ayudaba y Simic hacía el resto. Álex Dujshebaev, en alianza con Tarrafeta, tomó la responsabilidad en las operaciones ofensivas, Odriozola no fallaba desde los siete metros y Ángel Fernández continuaba con su labor desde el ala. Suficiente para mantener a raya a su primer rival en el Mundial, pero no para acabar definitivamente con él hasta casi el bocinazo final.

España, 30 - Montenegro, 25

España: Pérez de Vargas (1); Solé (1), Garciandia (2), Guardiola (-), Peciña (-), Dani Dujshebaev (4) y Ángel Fernández (5) —equipo inicial—; Corrales (ps), Maqueda (1), Alex Dujshebaev (4), Figueras (3), Casado (-), Tarrafeta (3), Sánchez-Migallón (-), Odriozola (6, 3p) y Dani Fernández (-).

Montenegro: Nebojsa Simic (2); Radovic (-), Branko Vujovic (7), Andjelic (1), Cepic (1), Milos Vujovic (2p) y Grbovic (3) —equipo inicial—; Matovic (ps), Bakic (1), Lazovic (2), Kaludjerovic (-), Stefan Vujovic (1), Sevaljevic (-), Bozovic (3), Lasica (2) y Vujacic (-).

Marcador cada cinco minutos: 3-4, 5-4, 7-7, 10-8, 13-10 y 15-12 (descanso); 17-14, 18-16, 21-19, 24-21, 27-23 y 30-25.

Árbitros: Brunner y Salah (Sui). Excluyeron por dos minutos a Alex Dujshebaev, Maqueda, Sánchez Migallón, Peciña, Cepic, Grbovic (2), Bozovic y Lazovic.

Tauron Arena, Cracovia. Unos 700 espectadores.

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