Vettel y Alonso, polos opuestos en la Fórmula 1

El debut de Sebastian Vettel en el Mundial de Fórmula 1 (2007) pasó bastante desapercibido porque coincidió con la guerra civil que se lio en McLaren entre los dos lados del garaje, ocupados por Fernando Alonso y Lewis Hamilton. Una década y media después de aquello, el alemán anunció este jueves que se retirará a final de temporada, dejando para la historia uno de los mejores palmareses de siempre, con cuatro títulos consecutivos entre 2010 y 2013, y numerosos récords de juventud de entre los que destaca el que le acredita como el campeón más precoz (23 años, cuatro meses y 11 días). Cuando el chaval de Heppenheim disputó su primer gran premio (Estados Unidos), el español ya se había encasquetado las dos coronas que figuran en su hoja de resultados, y él no estaba en condiciones de medirse en corto con quien acaba de romper la hegemonía de Michael Schumacher. Pero el crecimiento de Vettel fue incluso más veloz que el del Red Bull que pilotó a partir de 2009, circunstancia que le colocó en disposición de pelear por el título al curso siguiente, y con Alonso, abanderado del proyecto de Ferrari, como rival directo.

A partir de ese instante aquel pique fue a más, y con ello también la tensión entre ambos, convertidos ya en los buques insignia de sus respectivos equipos. “No luchamos contra Vettel, sino que lo hacemos contra [Adrian] Newey [el director técnico de Red Bull]”, llegó a decir el ovetense en 2012. Aquel año volvió a meterse en la gresca por el título hasta el último acto, en ese caso en Brasil, donde el alirón lo volvió a celebrar la tropa del búfalo rojo y su estilete, un muchacho con dientes refulgentes y cara de empollón, transformado en un demonio cuando se bajaba la visera. La superioridad de Red Bull en 2013 precedió a la de Mercedes a partir de 2014, y la salida del asturiano de la ‘Scuderia’, que le reemplazó precisamente por Vettel (2015), les separó en la pista pero les comenzó a unir fuera de ella.

Recién cumplidos los 36 años, el piloto de Aston Martin deja una vacante con vistas a 2023. El momento de anunciar su marcha no podía ser mejor para los intereses de Alonso, cuyas conversaciones con Alpine para abordar su renovación están en punto muerto a estas alturas de la película, y con el parón veraniego a la puerta de la esquina. A diferencia de Vettel, el bicampeón del mundo (2005 y 2006), que este viernes cumplió 41 años, no tiene la más mínima intención de dejar el ‘gran circo’. Según afirma, él preferiría seguir defendiendo los colores de su actual estructura que firmar por otra, una opción que tampoco descarta si el constructor francés no le da lo que pide, articulado todo en un contrato de dos años de duración. La salida de Vettel es la mejor palanca que puede emplear para ejercer cierta presión sobre los dirigentes de Alpine, por más que habrá que ver hasta qué punto harán un esfuerzo por retener a su principal reclamo, dado que Esteban Ocon tiene su asiento asegurado, al menos, hasta 2024.

En el alegato que hizo para argumentar su decisión de colgar el casco, Vettel subrayó la melancolía que siente cada vez que se va a las carreras y tiene que despedirse de su mujer y sus tres hijos. “Mis metas han cambiado, y han pasado de ganar carreras y pelear por títulos, a querer ver crecer a mis hijos, ayudarles a levantarse cuando se caigan, aprender de ellos y que me inspiren”, declaró en un mensaje colgado en su cuenta de Instagram, creada ese mismo día. Ese discurso es diametralmente opuesto al que ha hecho Alonso en las últimas fechas, en las que su principal propósito fue dejar clara su intención de alargar su paso por el certamen que en su día le colocó en un escaparate impensable hasta ese momento para cualquier piloto español.

“La retirada no es una opción que contemple a corto plazo. Mi cabeza está aquí y yo me siento fresco”, insiste el corredor de Alpine, que con el avance del calendario ha ido de menos a más, y que con Max Verstappen y Hamilton es el único integrante de la parrilla que ha puntuado en las últimas siete citas. Alonso, que hace pocos meses inició una relación con una periodista de una televisión austríaca tras romper con la modelo italiana Linda Morselli, solo tiene en la cabeza la F1, esa que tanto le empieza a pesar a Vettel.

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