Cuando Maradona jugó en el Granada

El Granada recibe al Nápoles (21.00, Gol TV) en una eliminatoria histórica para el conjunto andaluz, octavo en LaLiga, que se enfrenta al quinto de la Serie A en la ida de dieciseisavos de la Liga Europa. Será la primera vez que el Granada y el Nápoles se enfrenten en competición europea, aunque hay un hilo que une la historia de ambas entidades y que responde al nombre de Diego Armando Maradona.

Granada fue el escenario de un acontecimiento especial. Maradona, ya campeón del mundo con Argentina y estrella mundial en el Nápoles, con el que acababa de ganar la Liga y la Copa de Italia en 1987, se puso la camiseta del Granada en un amistoso que todavía se recuerda en la capital andaluza. Aquel verano de 1987, el Granada había conseguido subir a Segunda División A después de dos cursos en Segunda B. Al banquillo del Granada llegó Joaquín Peiró y el presidente, Alfonso Suárez Mendia, se embarcó en una aventura fascinante para consolidar su proyecto en Segunda y dar publicidad al Granada. El dirigente se propuso el fichaje de Lalo, hermano de la estrella mundial y delantero de Boca.

El equipo argentino pidió por el fichaje una gran cantidad de dinero que el equipo andaluz no podía asumir. Entonces surgió la figura de Diego, que compró él mismo la carta de libertad de Lalo para que pudiese jugar en el Granada. Maradona se trasladó a Madrid para hablar con el presidente del equipo andaluz después de solucionar el problema con Boca. Ambos quedaron, además, en que se podría sufragar la operación con la disputa de un partido amistoso con un enorme atractivo. Los tres hermanos Maradona vestirían la camiseta del Granada: Diego, el recién fichado Lalo y Hugo, que en aquel momento era jugador del Ascoli, italiano.

El 15 de noviembre de 1987 y siete días después de vestir la camiseta de un Nápoles invicto y líder en la Serie A, Diego Armando Maradona reforzaba al Granada para disputar un amistoso frente al Malmöe. Diego dejaba Nápoles para ayudar al Granada a fichar a su hermano. Los tres hermanos jugaron juntos. La victoria fue para el Granada por 3-2, con goles incluidos de Diego y de Lalo. El campeón del mundo se puso el brazalete de capitán del conjunto rojiblanco y marcó un tanto de falta con el nueve a la espalda. Festejó alborozado el gol en un choque en el que se logró recaudar el dinero necesario para sufragar el fichaje de Lalo. En realidad, se pagaron los gastos de estancia del equipo sueco y se le devolvió a Diego el dinero puesto por él para pagar a Boca por el pase de su hermano. Granada vibró con la llegada de Maradona en un acontecimiento que todavía se recuerda en la ciudad andaluza.

El rendimiento de Lalo Maradona no fue el esperado en el Granada. El equipo descendió a Segunda B y Lalo jugó 19 partidos, con dos goles marcados. Al siguiente curso, solo disputó ocho encuentros, con otros dos tantos. Jugó posteriormente en Venezuela, Argentina y Canadá. Diego jugaría luego en España en el Sevilla, en la temporada 92-93, mientras que Hugo, el mediano, fichó en 1990 por el Rayo Vallecano. Luego finalizó su carrera en Japón tras pasar por Austria y Uruguay.