Simeone: “Estamos en un año de transición”
El entrenador rojiblanco dice que su preocupación no es el Barça ni el Madrid, sino el Sevilla
La visceral y contundente Rocks de Primal Scream tronaba en el Wanda Metropolitano como un presagio de la salida volcánica que preparaba el Atlético. Durante los días previos, se le había reclamado a Diego Pablo Simeone un planteamiento ambicioso. La necesidad de ganar para no descolgarse de la pelea por el título acompañaba el reclamo de dibujar un partido de alto voltaje. Bajo la intensa manta de agua que ametrallaba el terreno de juego se desplegó un Atlético eléctrico al que su entrenador jaleaba. A cada recuperación de pelota en las inmediaciones del área, Simeone alentaba a la grada.
La salida en tromba deparó siete remates de los rojiblancos en 20 minutos, incluidos un centro de Hermoso que Junior desvió al palo y un remate a quemarropa del central que apuntó al cuerpo de Ter Stegen cuando tenía portería para embocar por derecha y por izquierda. Esa primera media hora jugada en modo zafarrancho y el intento por crecer en el segundo tiempo, cuando el Barça ya manejaba la pelota, generaron que, como en Turín, Simeone esperara a sus futbolistas al borde del terreno de juego cuando Mateu señaló el final del partido.
De nuevo Messi ejecutó al Atlético de Simeone en Liga. “Impotencia no siento porque ante un golazo solo queda aplaudir. Cuando la jugada se precipitó para el contragolpe olía a peligro. Messi y Suárez tienen esa situación bien manejada. Cuando el partido se parte, Leo aprovecha los espacios que el rival deja y ahí es un jugador determinante”, analizó Simeone. “Me quedo con todo la anterior que hicimos, sirve poco para la clasificación, aunque para lo que necesitamos seguir mejorando este partido nos sirve muchísimo”, prosiguió el preparador argentino, que sumó su decimonoveno partido de Liga sin poder ganar al Barcelona.
La derrota generó en Simeone la duda de cómo puede ser encajada por un plantel renovado, que se ve sexto en la tabla y fuera de las plazas de la Champions. “Reforzados hubiéramos salido con los puntos, los merecimientos son solo una caricia cuando miras la clasificación. Tenemos que seguir siendo un bloque como lo venimos siendo en los últimos partidos, buscar ser más fuertes. Esto es un pulso y hay gente que cuando les aprietan un poco tuercen la mano, esperemos que nosotros tengamos fuerza en el brazo y en la muñeca”.
Simeone escuchó cómo parte de su hinchada le recriminó el cambio de João Félix. “Sentí que hasta ese momento había dado todo y estaba cansado. Quería poner a Vitolo, un jugador al que la gente le quiere mucho también. En esa función de João es el que mejor nos hace tener transiciones en ataque. Nosotros estamos expuestos a las críticas”.
Preguntado por si falta paciencia, el técnico del Atlético lanzó un mensaje sobre los objetivos a cumplir. “Yo soy el que menos tiene, pero hay que entender el cambio enorme que ha habido en el equipo, que necesita su tiempo para mejorar. Hay que entender que estamos en un año de transición. Estamos mejorando en el juego, pero la parte más importante, que es el gol, nos falta. El Madrid y el Barça no me preocupan, me preocupa el Sevilla, que ya nos saca cinco puntos”.
Esas palabras de Simeone chocaron con las declaraciones de Clemente Villaverde, consejero delegado del Atlético: “La transición nuestra es estar peleando siempre arriba por todo. Tenemos 11 jugadores nuevos, pero tiene que ser una transición que te permita pelear por todo”. En esa línea también se expresó Saúl, que tras recalcar que “Messi es el que hace la diferencia”, y concluyó: “Se han ido muchos jugadores de peso, que conocían todo. Los que vienen aportarán, pero se tienen que ir adaptando. Aquí hay que ganar todos los partidos, sea quien sea”.
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