Una defensa de campeonato
Scariolo y sus jugadores elogian el esfuerzo grupal para contener a Italia rumbo acuartos con Claver al frente de una retaguardia que el técnico sitúa “en el podio de estos años”
Defendía España en Wuhan la vigencia de una marca competitiva, la solvencia de un grupo huérfano de muchos de sus referentes históricos y la necesidad de reivindicarse ante las dudas acumuladas en otra primera fase espesa. Defendía tantas cosas que defendió como nunca para responder como siempre. En ausencia de fluidez ofensiva y con tan solo una canasta de su referente, Marc Gasol, la selección apretó los dientes para para enseñar los colmillos, secó a Italia y puso rumbo a cuartos de final del Mundial. Mañana, ante Serbia, los de Scariolo se jugarán la primera plaza del grupo que, en función de los resultados, podría llevar asociado el premio de evitar a Estados Unidos en una hipotética semifinal. En el cruce se encontrarán a Argentina o Polonia que, ya clasificadas, se medirán en duelo directo para determinar su posición en un encuentro casi simultáneo.
Ante Italia, continuó el colapso en ataque (6 de 23 en triples), se repitió el inicio a contrapié (siete pérdidas, un 2 de 8 en tiros de campo y un 5-15 en contra en los primeros seis minutos). Pero la solidez colectiva y la aportación de la segunda unidad sirvieron a España para escribir otro capítulo memorable de su libro de estilo, ese que se ha reeditado en los últimos años bajo los títulos Estar el día que hay estar, La mejor versión en el momento clave o No estaba muerto, estaba de rodaje.“Es difícil decir si ha sido nuestra mejor defensa en años pero, con la experiencia, el talento y estructura física del equipo… estaría en el top 3, en el podio seguro”, valoró Scariolo tras rendir a Italia. “Todo el mundo ha dado lo mejor de sí mismo, más allá del inicio. Los que han salido desde el banquillo nos han dado un empuje decisivo y los que partían de salida recuperaron la confianza para terminar bien”, explicó el seleccionador, que tuvo dos intervenciones determinantes en el encuentro. La primera, por importancia colectiva, el tiempo muerto con el que cortó el parcial con el que se presentó Italia. “Ahí nos hemos recordado el compromiso que teníamos. Había que volver a arrancar. Tendré que empezar a decirles que empiecen mal los partidos”, bromeó el técnico. La segunda, por lección particular, cuando sentó a Juancho, para que “espabilara” como confesó después el protagonista.“Quería darle un toque. Que él sintiera la confianza, que supiera que quedaba todo por delante y tenía que volver con otra concentración defensiva”, desarrolló Scariolo.
La reacción de Juancho fue contundente y le llevó a anotar 10 puntos en el segundo cuarto con los que España comenzó a hacerse fuerte en el encuentro. “Estoy muy contento con Juancho porque ha jugado su primer gran partido a nivel internacional. Tiene que entender de lo que es capaz y aprender de los errores, así se mejora y así se convertirá en jugador referente. Hoy todos hemos almacenado una gran experiencia de intensidad y dureza”, reiteró Scariolo, que también dedicó una parte importante de su intervención a elogiar a Claver. “El tiro de tres fallado por Gallinari (52-56) ha sido decisivo. Los cinco jugadores que han compuesto el quinteto en los últimos cuatro minutos han hecho defensas impresionantes. Merece la pena destacar sobre todo la de Víctor sobre Gallinari. A veces no se valora su trabajo”, reivindicó el seleccionador. “Admiro mucho a Gallinari. Tenemos la misma edad y le conozco desde hace mucho. Llevo años jugando contra él. Tenía ganas a este encuentro, era una motivación pararle, que no estuviese cómodo. Sobre todo al final, quería asumir esa responsabilidad y ha salido bien”, contó el propio Claver rememorando sus batallas frente al nuevo jugador de Oklahoma.
Con una aportación discreta de Ricky (15 puntos y 7 de la 15 pérdidas de la selección) y Marc, España proyectó por fin una imagen de solidez que hasta la fecha no había cuajado. Frente a un roster reconocible y un enemigo con caché, la ambición y la motivación llegaron de la mano. “En ataque seguimos sin estar muy acertados, pero cuando dicen que las defensas ganan campeonatos se demuestra con partidos como el de hoy”, comenzó su análisis Ricky. “Somos un equipo con garra y sabemos que siempre vamos a defender con un cuchillo en los dientes. Lo hemos vuelto a demostrar”, prosiguió el base de los Suns mezclando la autocrítica y el elogio. “Esa es la fuerza de este equipo. Sabemos que Marc y yo tenemos que tirar del carro muchas veces, pero también tenemos jugadores como Llull, Rudy, Juancho…”, completó el jugador del Masnou. “No veníamos de la mejor forma, a pesar de las tres victorias, pero de nuevo se ha visto lo que podemos hacer. La capacidad defensiva de este grupo es muy buena. Dejar a Italia en 60 puntos, según estaba jugado, hacía tiempo que no se veía”, completó Rudy en la defensa de la defensa.
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