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“Las jóvenes ya tienen en quién fijarse”

El seleccionador Miki Oca enfatiza el compromiso de una generación de waterpolistas que lleva años en la élite y su deseo de mejorar para hacer frente a EE UU

Robert Álvarez
Miki Oca, durante un partido en Gwangju.
Miki Oca, durante un partido en Gwangju.Catherine Ivill (Getty Images)

Miki Oca (Madrid, 49 años) cumple nueve años como seleccionador de un equipo femenino español que se reafirma en una época dorada sin precedentes. Fue precisamente poco después de que Oca accediera al cargo cuando las waterpolistas españoles dieron el gran salto cualitativo en la élite internacional con la plata en los Juegos de Londres.

Pregunta. ¿Qué lectura extrae del Mundial?

Respuesta. Estamos muy satisfechos. Siempre es muy difícil conseguir una medalla en un Campeonato del Mundo. La hemos logrado y a la vez hemos obtenido la clasificación para los Juegos, algo que era muy complicado y que nos permite planificar mejor una cita tan importante como Tokio.

P. Usted lloró de rabia cuando fue plata en los Juegos del 92. Las jugadoras españolas estaban radiantes esta vez con la plata del Mundial.

R. Es que ellas sabían lo cara que estaba la medalla en este Mundial, en este circuito femenino. Está muy bien haber llegado a la final. Estados Unidos lleva 10 años dominando de una manera muy clara. Por eso, pese a la alegría, más que justificada, sabemos lo duro que tenemos que trabajar para continuar mejorando.

P. ¿Cómo pueden progresar?

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R. Uno de los aspectos es el trabajo físico. Nuestras jugadoras han llegado muy bien, pero ellas [EE UU] son muy potentes. En ello hay mucho de genética. Poseen más envergadura, son más grandes en tamaño y en peso, pero no tenemos que resignarnos. Tenemos que mejorar nuestros niveles de fuerza para igualarnos y, a partir de ahí, competir mejor. Y también tenemos que mejorar cuestiones de técnica.

P. ¿Qué va a cambiar en la preparación la próxima temporada?

R. Contamos con el apoyo de los clubes y, para preparar el año olímpico, probablemente trabajaremos un par de días semanalmente en lugar de acumularlo todo en un mes y medio como hasta ahora. Así avanzaremos el trabajo para dejar los aspectos específicos solo para las semanas previas.

P. ¿Y competitivamente?

R. Tenemos un Europeo y lo siguiente ya serán los Juegos. Con esta plata hemos conseguido saltarnos el paso del preolímpico, que se jugará en marzo y es muy complicado. Solo se clasifican 10. Es muy duro y conlleva muchísimo estrés.

P. ¿Y ahora?

Debemos mejorar nuestros niveles de fuerza para competir mejor

R. Ahora volvemos a Barcelona, pero siempre tenemos un ojo puesto en los Juegos. Las chicas tendrán un periodo de descanso. En septiembre, iremos al Mundial júnior, en Funchal. Nos pondremos manos a la obra prontito.

P. ¿Hay jugadoras jóvenes que puedan dar ya el salto?

R. Además de Paula [Leiton], que lleva ya en la selección hace años, hay otras cinco o seis jugadoras júnior con la que ya hemos contado en el grupo de 22 de la absoluta. Hay jóvenes que están subiendo muy bien. De hecho, el verano pasado lograron el oro en el Europeo y el Mundial, y están creciendo muy bien. Veremos hasta qué punto porque siempre hay un pequeño salto entre una categoría y otra.

P. Esas júnior debieron empezar ya con el ejemplo de esa generación que empezó a triunfar a lo grande con Jennifer Pareja y varias de las más veteranas del actual equipo...

R. Las jugadoras españolas están compitiendo muy bien desde hace años, subiendo a los podios de las grandes competiciones, y eso beneficia a las generaciones que llegan porque son sus referentes. Eso ayuda. Tienen en quién fijarse, de quién aprender, a quién imitar. Ese es un activo de esta selección.

P. El waterpolo femenino, a diferencia del masculino, no destacaba. ¿Cuando le nombraron seleccionador pensaba que podían dar ese salto?

La progresión es espectacular. Este grupo no pierde el compromiso

R. Ni me lo planteé por la ilusión que me hizo. No dudé ni un segundo en aceptar. Sí, la progresión fue espectacular, pasamos de ser octavas en el Europeo y decimoprimeras en el Mundial a la plata olímpica. Y desde entonces, salvo algún año, hemos estado dando un nivel bastante bueno. Este grupo no pierde ni el hambre, ni el compromiso, ni la ilusión.

P. ¿Una vez finalizada la final, cuál ha sido su último mensaje en el vestuario?

R. Muy sencillo, les he dicho: ‘Hemos acabado, ha sido una derrota y claro que estamos todos dolidos, y eso es bueno porque queremos más y eso demuestra nuestra ambición. Queremos más. Pero al final tenemos una medalla de plata, la clasificación para los Juegos y hemos jugado a un buen nivel. Es para estar más que satisfechos’.

P. ¿Su contrato concluye en los Juegos? ¿Cuáles son sus perspectivas de futuro?

R. Sí, los contratos suelen hacerse por periodos olímpicos. Es lógico, y además, hay elecciones. Me siento el más afortunado del mundo con este grupo fantástico de chicas y me siento apoyado por los técnicos y la federación. No puedo pedir más. Estoy encantado y estaría aquí otros diez años.

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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