San Mamés se encomienda a Berizzo

Olvidada la etapa del Cuco Ziganda, tan dolorosa en lo sentimental (el recuerdo de sus 42 goles como rojiblanco siempre equilibró la balanza de sus desaciertos en el banquillo) como en lo deportivo (a la falta de resultados se unió un desafecto evidente por las formas), el Athletic comienza hoy ante el Leganés (22.00, GOL) un nuevo capítulo en manos de Eduardo Berizzo. Un técnico que ha logrado reflotar los recuerdos, todavía presentes, del que reconoce como su mentor, Marcelo Bielsa, y al que replica en filosofía y metodología de trabajo. “Mi deseo es lograr que la gente se sienta orgullosa de su equipo”, aseguró ayer en rueda de prensa, consultado por sus primeros anhelos en un San Mamés que recibirá al equipo en plena Semana Grande de Bilbao.

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Místico en la concepción de que el ambiente impregna de sensaciones al jugador, Berizzo concertó ayer un entrenamiento espiritual para los recién llegados, en una especie de bautismo arquitectónico. “Hay futbolistas que no estaban la temporada pasada y quiero que se adapten al césped y también absorban el espíritu de San Mamés. Para mí es un placer sentir la atmósfera y para los jugadores es muy estimulante”, explicó.

En el verano más fructífero de los últimos cinco años, con 28 millones de euros invertidos en cuatro incorporaciones —Yuri (24), Capa (3), Ganea (1) y Dani García (libre)—, solo la millonaria marcha de Kepa al Chelsea (80), y la incapacidad de captar a los realistas Merino y Oyarzabal ha cuestionado ese espíritu renovador que trata de impregnar el técnico a una plantilla sobrepoblada en varias líneas.

Remiro, portero titular

La llegada de Dani García y el regreso de Unai López (cedido la temporada pasada al Rayo Vallecano) ha desbordado la cartera de centrocampistas. Con Iturraspe, Mikel Rico, San José, y Beñat, son hasta seis los jugadores disponibles para dos puestos, en una plantilla en la que, sin embargo, escasean los interiores (Susaeta y Córdoba) y abundan los laterales izquierdos (Yuri, Ganea y Balenziaga). “No creo que estemos en nuestro techo, pero listos para competir en el primer partido de la temporada”, valoró Berizzo, que tras la lesión de Herrerín alineará a Remiro, tercer portero el curso pasado, como titular esta noche. El navarro, de 23 años, clave en el ascenso a Primera del Huesca, es la apuesta de futuro que se ve obligada a adelantar los plazos.

“Tengo la particularidad de llevar meses esperando este inicio de liga y estoy ilusionado con empezar una liga muy fuerte en casa”, recalcó Berizzo, que dejó pistas del plan de juego que pretende establecer como norma habitual de comportamiento. “Para poder atacar bien necesitamos construir bien desde atrás. Con la paciencia y la variación necesaria ante un equipo que seguramente se defenderá bien. Si perdemos la pelota en lugares inapropiados, nos exigirán correr hacia atrás y eso tenemos que evitarlo”, desveló.

El de Berizzo no será el único estreno en los banquillos del partido. Mauricio Pellegrino debutará también con el Leganés. “Somos de una zona de Argentina muy pegada en la misma región y muy cercana entre pueblo y pueblo. Nos conocemos de habernos enfrentado mucho y tenemos amigos comunes. Será un reto, aunque nunca me enfrento a otro entrenador sino a otro equipo”, indicó el técnico del Athletic.