Zidane: “No estamos jugando mal, no es un problema de fútbol”

Más tarde de lo habitual, rozando las 14.00, Zidane apareció por la sala de prensa de Valdebebas. Afrontaba una de sus conferencias más delicadas, con el equipo inmerso en la peor racha de resultado y juego desde que se sentara en el banquillo del Real Madrid en enero de 2016. Pero el momento y la tensión no perturbaron a Zidane. Calmado como siempre, el técnico francés negó la crisis. "No estamos en un momento agradable, pero tampoco es una crisis. Sabemos lo que tenemos que hacer, hay que pensar en positivo, somos los mismos. Esto es fútbol, ya nos pasó el año pasado. Al final conseguimos cosas importantes”.

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Repitió una y otra vez que son el mismo equipo que hace unos meses y que toca poner energía mientras renegaba de que la causa de los problemas de su equipo fuese el mal juego. "No estamos jugando mal al fútbol. Alguna vez a ratos, quizá. No creo que sea problema de fútbol, no jugamos mal todos los partidos ni tampoco un partido completo. Algo pasa. ¿Qué podemos jugar mejor? Sí, pero ese no es el problema. Nosotros pensamos que somos los mismos. No estamos contentos con las dos derrotas, pero no cambian lo que queremos conseguir”, dijo el técnico. 

Galardonado hace escasas semanas como el mejor entrenador del mundo, Zidane tiró de mesura explicar que ni entonces tanto ni ahora tan poco. "No puedo evitar que la gente diga lo que piensa. No soy el mejor, puede que el premio venga por todo lo que conseguimos la temporada pasada, eso lo acepto. Pero ni antes era el mejor ni ahora mismo soy el peor. Yo siempre estoy en el medio, haya euforia o aunque vayan las cosas mal. También me pasaba cuando era jugador" explicó. Pese a las dos últimas derrotas, estar segundo en la fase de grupos de la Champions y ocho puntos del Barça en Liga, Zidane intenta esconder que atraviese su peor momento en los banquillos. "No creo que sea así. Soy fuerte y sé que cuando todo va bien es más fácil, pero nuestros jugadores han demostrado que cuando se pone difícil dan la cara. Vamos a intentar cambiar la dinámica. Levantar trofeos y que todo el mundo quiera hacerse la foto es fácil, pero vamos a demostrar que podemos salir de esto”, confesó.

No se quiso meter el francés en las declaraciones de Cristiano en torno a la confección de la plantilla. Aseguró el portugués tras la derrota en Wembley que el equipo era más fuerte con James, Pepe, y Morata que con los sustitutos que llegaron en verano. "No voy a hablar de lo que pasó, solo me interesan los jugadores que tengo. Las cosas se hacen y lo tienes que aceptar", espetó el técnico, que aunque no recupera a nadie para el partido del domingo frente a Las Palmas, ya ha podido ver con el grupo a Gareth Bale y Dani Carvajal. "No van a jugar. Después de mucho tiempo parado, con Dani hay que tener paciencia. Y Gareth igual, ni va a entrar en la lista ni va a ir con su selección. Se va a quedar aquí con nosotros trabajando”, anunció el francés. "Pero estamos contentos porque han vuelto los dos. Nos falta Kovacic, que volverá la semana que viene. Es un proceso normal, contento de que estén los dos”.