Asensio sí, pero a pequeños sorbos

Al terminar el Madrid-Valencia del 27 de agosto, y antes de que los internacionales españoles se incorporaran a la concentración de la selección, el correo electrónico del responsable de comunicación del Real Madrid echaba humo. No paraban de llegar peticiones de entrevistas para Marco Asensio. El joven mallorquín, máximo goleador del equipo en este arranque de temporada con cuatro tantos en cinco partidos, ha tenido una explosión que muchos comparan a las de Butragueño y Raúl en su día. A sus 21 años, su evolución parece imparable. Hoy contra el Levante (13.00, BeIN LaLiga) puede volver a ocupar la banda de Cristiano, que no jugará hasta el día 20 contra el Betis por la sanción.

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Zidane, que le dijo a Asensio en un entrenamiento que desde Leo Messi no veía una zurda como lo suya, asegura que no le gusta mucho el ruido de fuera. Sí que elogien a Asensio y que hablen de él, pero que le dejen tranquilo. “No estoy sorprendido por su progresión, lo que aporta al equipo es fenomenal, pero al mismo tiempo hay que dejarlo en paz y tranquilito porque todavía puede mejorar muchísimo. Él tiene que estar tranquilo y es importante que se lo tome así. Se puede opinar, se pueda hablar muy bien de él, pero al final lo importante es que tenga la cabeza fría, para seguir con su evolución, porque no ha tocado techo todavía, con humildad y paciencia, que la tiene, todo el ruido de fuera a mí no me… Quiero que esté tranquilo”, dijo ayer el técnico francés.

Zidane es de los que más disfruta con él, pero advierte del peligro de la borrachera. Por eso invita a tomarse a Asensio a pequeños sorbos. Es lo que le explicó al mediapunta mallorquín durante la temporada pasada. Que trabajara mucho, que no se preocupara si no jugaba y si se quedaba fuera de las convocatorias, porque no dejaba de ser su primer año en el Madrid, y que había que ir poco a poco. Y Asensio tomó nota. Dijo haberlo pasado mal porque no estaba acostumbrado al papel de suplente, pero que aprendió a no bajar los brazos. Y tuvo su premio.

Saber esperar

En ese espejo se miran los jóvenes que han llegado al Madrid este verano. En las charlas que Asensio ha tenido con Ceballos y Vallejo, sus compañeros y amigos de la sub-21, y con Théo Hernández, con el que le gusta alargar las sobremesas junto a Nacho, Isco y Sergio Ramos, seguro que les ha transmitido la importancia de tener paciencia, saber esperar y al mismo tiempo trabajar mucho.

Ceballos (21 años) suma 10 minutos, Vallejo (20 años) acaba de volver al grupo tras superar la lesión muscular que sufrió hace casi un mes y todavía no ha debutado. Marcos Llorente (el mayor de todos, con 22) debutó en A Coruña y suma 18. Théo Hernández, el lateral izquierdo de 19 años, apenas ha sumado 15 minutos. Dicen en Valdebebas que al que más mira con admiración Théo es a Asensio por cómo le está saliendo las cosas. Le considera un genio.

“Estamos contentos con Théo, está listo para jugar, no sé si será mañana [por hoy] o en los próximos 20 días en los que tendremos siete partidos. La plantilla es de 23 y voy a tener que elegir, vamos a necesitar a todos”, contestó Zidane cuando le preguntaron por el aprendizaje de Théo. El joven lateral, con el que el técnico suele mantener charlas en francés antes de entrar el vestuario, dijo el día de su presentación que venía a aprender de los mejores. Entre ellos, no sólo está Marcelo, su referente en el lateral izquierdo, sino también Asensio.