_
_
_
_
_

El Tour perdona a Urán, que recupera 20s y se queda a 35s en la general

El colombiano, cuarto en la clasificación, había sido sancionado por coger una botella de agua a cinco kilómetros de la meta en Peyragudes

Carlos Arribas
Urán y Bennet, a su rueda, durante la ascensión del Peyresourde, el jueves.
Urán y Bennet, a su rueda, durante la ascensión del Peyresourde, el jueves.Peter Dejong (AP)

El Tour del 17 es tan abierto e igualado que a diferencia entre ganarlo y perderlo o entre ocupar una plaza en el podio de París podría medirse en segundos. Así lo cree al menos Jonathan Vaughters, el patrón del Cannondale, que protestó amargamente por la sanción de 20s impuesta a Rigoberto Urán, el colombiano con el que piensan ir a por todas, por avituallamiento irregular (es decir, cogió, a cinco kilómetros de la meta, una botella de agua que le tendió un ayudante de Cannondale) en el final de etapa de Peyragudes, el jueves. Los lamentos de Vaughters tuvieron tanto eco que, en una decisión casi insólita (las decisiones de los comisarios son inamovibles), el jurado ha decidido el viernes por la mañana, antes de la salida de la 13ª etapa levantarla. Sin la carga de los 20s suplementarios, Urán sigue siendo cuarto en la general, pero solo a 35s del líder, Fabio Aru, a 29s de Chris Froome y a 10s de Romain Bardet.

El reglamento de la Unión Ciclista Internacional (UCI) prohíbe avituallar a los corredores en los últimos 20 kilómetros de cada etapa y en los finales en alto, principalmente para evitar que desde los coches los corredores reciban agua y también un empujón y un impulso que pueden ser clave. Sin embargo, el reglamento no precisa que solo se prohíbe esa ayuda.

Urán no fue el único ciclista al que sancionaron en la llegada a Peyragudes. El neozelandés George Bennett (noveno de la general, ahora a 4m 4s) y el belga Serge Pauwels (27º, a 33m 34s) también la sufrieron y también se han beneficiado del indulto, una marcha atrás justificada por el presidente del jurado, el belga Philippe Marien, en el hecho de que había tanto público en las cunetas que había sido imposible antes un avituallamiento regular. Pero lo que indignó más a Vaughters, que lo tomó por escarnio, fue que el francés Bardet, el ganador de la etapa, también recibió una botella desde la cuneta, como muestran las imágenes de la televisión, y no fue sancionado. El Ag2r, el equipo del francés, explicó que no se trataba de una avituallamiento porque el ciclista no bebió sino que usó el agua para regarse la cabeza solo. Unas imágenes de la NBC mostraba, sin embargo, a Bardet llevarse la botella a la boca y dar unos sorbos. El comentarista de la cadena norteamericana le envió la grabación al jurado el jueves por la noche, pero sus miembros se negaron a visionarla y tomarla en consideración. Solo el viernes por la mañana tuvieron la capacidad de recapacitar y deshacer lo que todos los corredores y equipos rivales de Urán consideraban una injusticia.

La 13ª etapa, la temida jornada corta (100 kilómetros) y durísima (tres primeras, incluido el Muro de Péguère) que despide a los Pirineos, parte a las 14.45.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_