Vettel: “No puedo volver atrás y deshacer lo que hice”

La Federación Internacional del Automóvil (FIA) se ha metido en un charco del que todavía no se pueden calibrar las consecuencias futuras que pueda tener. El comportamiento de Sebastian Vettel en Bakú, donde chocó voluntariamente con su Ferrari contra el Mercedes de Lewis Hamilton al interpretar que este frenó intencionadamente cuando lideraba el pelotón detrás del coche de seguridad, obligó al alemán a presentarse el pasado lunes en la sede de la FIA, en París. Vettel se fue de rositas del tribunal después de disculparse, y acto seguido emitió un mensaje en el que pedía perdón públicamente. Para muchos, quien queda retratada en todo este asunto es la FIA y su campaña a favor de una conducción responsable, puesto que de alguna manera la decisión de exonerar al tetracampeón tras una maniobra tan peligrosa como la que realizó, compromete los valores que tratan de promoverse.

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Este jueves, a las puertas del Gran Premio de Austria que se celebra este próximo domingo en el Red Bull Ring, la FIA colocó juntos de nuevo a los dos principales protagonistas de la última carrera, para que dijeran la suya y, de esta forma, el tema pudiera quedar zanjado. Después de escuchar al uno y al otro, una tiene la sensación de que el precedente que se ha creado podrá tener un impacto evidente en próximos encontronazos. Más aún si atendemos a la actitud desafiante y hasta cierto punto chulesca que mantuvo Vettel cuando se le preguntó por lo sucedido en las últimas dos semanas.

“Colocarme a su lado y golpearle fue una decisión equivocada. Cometí un error y estoy contento de que aquello que hice no vaya a tener mayores consecuencias”, dijo el corredor de Ferrari, cuyo arrebato en Azerbaiyán le salió de lo más barato: 10 segundos de penalización que se le aplicaron allí mismo. “Hablé con Lewis el lunes, después de la carrera. No había ninguna necesidad de hablar con ustedes [los medios de comunicación] porque no son lo más importante”, prosiguió el tetracampeón. “Está claro que me equivoqué y por eso me disculpo. Si pudiera volver atrás y deshacer lo que hice, lo haría. Pero nunca tuve la intención de hacerle daño a Lewis”, zanjó Vettel, que a pesar de todo incluso cruzó la meta el cuarto, por delante de su rival, que fue el quinto.

“Hablamos, me mandó un mensaje y yo acepto sus disculpas. El respeto que nos tenemos como pilotos lo mantendremos”, afirmó Hamilton. “Solo le pedí que dejara claro públicamente que yo no frené a propósito para bloquearle, algo que los datos reflejan”, pidió el británico, que de todos modos insistió en que todo el conflicto no articula un mensaje que merezca la pena lanzar al mundo. “Una batalla intensa siempre es buena para el deporte. Pero somos modelos, una plataforma para mandar mensajes, y eso deberíamos tenerlo claro”, zanjó el de Mercedes.