Siniestro total de los Spurs ante los Rockets de Harden

Y de repente, a los Spurs se les vino encima una avalancha de juego y de triples, la de los Rockets. Houston fue un vendaval en San Antonio (99-126). Arrasó de principio a fin. Al descanso dominaba por 30 puntos (39-69), la mayor desventaja de los Spurs en la historia de los ‘playoffs’.

Harden sumó 20 puntos y 14 asistencias; Ariza, cinco triples y 23 puntos; Capela, 20 puntos y 13 rebotes. Casi todos los jugadores de los Rockets brillaron. Con un ritmo de juego mucho más veloz, manos rápidas en defensa y sobre todo mucha puntería con 22 aciertos en los 50 triples que lanzaron, los Rockets arrasaron en San Antonio.

En cambio, no hubo noticias de Parker, de Aldridge y menos aún de Green y Lee, que se habían quedado a cero al descanso y apenas lo arreglaron después. Solo Leonard y de manera muy limitada ponía en algún aprieto a la defensa del equipo de Mike D’Antoni.

Gregg Popovich pidió muy rápido los dos primeros tiempos muertos del partido. Se agarró un par de buenos berrinches. Pero la situación no dejó de ir a peor. Introdujo cambios muy rápido. Dio entrada a Ginóbili, a Pau Gasol, a Mills, pero nadie pudo arreglar el desaguisado. Los Rockets estaban muy certeros desde la línea de tres y muy prestos a la hora de robar balones y disparar sus transiciones ofensivas.

Lejos de reducirse, las diferencias se incrementaron en el tercer cuarto, hasta llegar a los 36 puntos (47-83) y hasta los 39 en el último (80-119). El partido quedó visto para sentencia muy pronto. Prácticamente durante todo el último cuarto ambos entrenadores utilizaron a los reservas. Los Spurs se convirtieron en una caricatura de equipo, incapaces de frenar el vendaval de los Rockets y muy desacertados en ataque.

Los árbitros expulsaron a Nene Hilario al inicio del último cuarto tras un rifirrafe con Dedmon, que fue expulsado también a raíz de otra acción minutos después. Leonard, con 21 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias fue el único que se salvó de la quema en los Spurs. Pau Gasol se movió en la discreción general de su equipo, con 6 puntos y 6 rebotes en 22 minutos. El varapalo fue mayúsculo para los seguidores de los Spurs y muchos de ellos abandonaron el ATT Center mucho antes del final.

LeBron James marcó la pauta en el primer partido entre Cleveland y Toronto (116-105). El campeón de la NBA, el equipo que barrió a Indiana (4-0) en la primera ronda, no dio la más mínima oportunidad a los Raptors.

Los Cavaliers empezaron a todo trapo (38-20) y, pese a algún vaivén (42-39), mantuvo a raya a los Raptors y decidió el partido muchísimo antes del final. Tyronn Lue, el entrenador de los Cavaliers, pudo permitirse el lujo de sentar a sus titulares para dosificarles de cara a próximas batallas.

LeBron sumó 35 puntos y 10 rebotes, Kyrie Irving, 24 puntos y 10 asistencias, y Kevin Love, 18 puntos y 9 rebotes. Los Raptors actuaron en varias fases con un equipo de pequeños, ‘small ball’, y lograron algún parcial interesante, pero los Cavaliers siempre acabaron resolviendo con autoridad. La defensa de los Cavaliers consiguió limitar los daños del trío de estrellas de los Raptors, con 20 puntos y 11 asistencias de Lowry, 19 puntos de DeRozan y 15 puntos, con tres triples sin fallo, 6 rebotes, 3 asistencias de Ibaka.

CLEVELAND, 116; TORONTO, 105

Cavaliers: Irving (24), JR Smith (6), LeBron James (35), Love (18), Thompson (11) –equipo inicial-; Fry (5), Williams (4), Shumpert (5), Korver (6) y D. Jones (2)

Toronto: Lowry (20), DeRozan (19), Carroll (3), Ibaka (15), Valanciunas (6) –equipo inicial-; Powell (12), Patterson (5), Tucker (13), Joseph (10), VanVleet (6), Poeltl (2) y Wright (2).

Parciales: 30-18, 32-30, 34-26 y 20-31.

Quicken Loans Arena de Cleveland. 20.562 espectadores.