El Villarreal derrota al Athletic con sus armas

En dos jugadas a balón parado y un contragolpe, el Villarreal hizo suyo el manual del Athletic para derrotar con tres goles al conjunto de Valverde, que solo pudo descontar uno, el que igualaba el marcador en el primer tramo de partido. Dominador del juego con Bruno y Trigueros soberbios durante una hora de encuentro, y de las áreas en todo el partido, el Villarreal consiguió una victoria trabajada, sufrida y bronca, con un jugador menos en los últimos 20 minutos del choque por la merecida expulsión de Víctor Ruiz. El equipo de Fran Escribá se acerca a su objetivo europeo mientras sueña en poder alcanzar al Sevilla por un puesto en la Champions. El Athletic cayó derrotado con sus armas sin cerrar su portería ni saber atacar la de Andrés Fernández. Esta vez no apareció Aduriz, frenado en dos ocasiones por el poste alto, para remediar los males del conjunto de Valverde cuando cruza la puerta de San Mamés.

Europa en juego, respeto entre el Villarreal y Athletic, intensidad y fútbol en ambos  equipos, bien dotados técnicamente, capaces de manejarse en varios registros, más eclécticos los amarillos. Poderoso el conjunto de Valverde en el juego aéreo, pasado el cuarto de hora se vio por detrás en el marcador en una acción de estrategia del conjunto de Escribá, que en segunda jugada, tras botar el saque de esquina en corto, alcanzó el gol gracias a Víctor Ruiz, atento al rechazo del palo derecho de Kepa.

La respuesta del Athletic fue inmediata. Tres minutos después fraguó el empate, también desde la esquina, lanzado el córner directamente al segundo palo. Estaba Laporte de receptor, sin ningún defensor vigilando al central francés, que batió a Andrés Fernández con un disparo seco de derecha. Dos goles que encendieron el encuentro, incierto y disputado, masticando las jugadas el Villarreal, más directo el Athletic. Nada extraño si se alinean juntos Wiliams, Raúl García y el incombustible Aduriz.

El partido estaba vivo, sin conformismo alguno, de área a área, más frecuentada la de Kepa, que respondió con firmeza a un tiro lejano de Mario. Con problemas musculares, Samu Castillejo tuvo que abandonar el terreno de juego a los 35 minutos, siendo sustituido por Adrián, un esteta, un delantero ocupando la banda derecha.

Gobernando el esférico, el Villarreal comenzó a monopolizar el juego, y obligó a la prudencia al Athletic, más básico en su proceder, igualmente peligroso. En un centro lateral de De Marcos, Aduriz, ganando en el salto a Víctor Ruiz, remató de cabeza al larguero de Andrés Fernández. En el contragolpe posterior del Villarreal, Mario se llenó de balón tras una perfecta dejada de Adrián. Concluía así la primera mitad, con dos grandes oportunidades repartidas, sinónimo de la igualdad patente en ambos conjuntos, más dúctil el grupo de Escribá.

No pudo comenzar mejor el segundo acto para el Villarreal, que alcanzó un contragolpe letal lanzado por Roberto Soriano, clarividente el centrocampista italiano para filtrar un pase de oro a Bakambu, que se deshizo con un quiebro de Yeray. El disparo del franco-congoleño, raso y esquinado, resultó imparable para Kepa. La jugada nació de una falta a favor del Athletic botada hacia el área amarilla en busca de Aduriz. Las jugadas a balón parado se habían convertido en un lastre para el Athletic, que posteriormente encajó un tercer gol en una falta lateral sacada por Trigueros, prolongada por Víctor Ruiz y empujada a gol por Adrián López.

La entrada inmediata de Iturraspe y Muniain no surtió el efecto esperado por Valverde. Pero siempre está Aduriz, capaz de crear una ocasión de la nada. Voleó un balón tras acomodárselo a su derecha, comprobando nuevamente cómo el larguero evitaba acortar distancias. Volcado el Athletic, Víctor Ruiz resultó expulsado con roja directa a falta de 20 minutos para concluir el encuentro por una dura entrada a Wiliams en el centro del campo. El Villarreal supo resguardar el resultado para asegurar su quinto puesto y alejar al Athletic, al que le queda un camino más pedregoso para alcanzar Europa.