Brindis con goles entre el Espanyol y Las Palmas

El fútbol brindó con goles en Cornellà. En un partido divertido, intenso, sobre todo cambiante, el Espanyol se impuso a Las Palmas. Golpeó el cuadro blanquiazul de entrada y los canarios contestaron con su única fórmula, la pelota. El central Lemos se disfrazó de goleador, mientras que Gerard Moreno hizo de todo en el Espanyol. El delantero marcó y asistió, líder blanquiazul esta temporada, ayer también ante Las Palmas para coronar el festival de goles en el RCDE Stadium.

A veces parece que el Espanyol vive más pendiente del futuro que del presente. Los sueños de Europa y el proyecto de Sánchez Flores tienen el reloj en el mañana. Las Palmas, sin embargo, vive del día a día, todavía sin noticias del nuevo contrato de Quique Setién. Quería el cuadro blanquiazul cuidar más la pelota, un negocio peligroso cuando en el camino se te cruza Las Palmas. Los canarios son, después del Barça, el equipo que más pases cuenta por partido. El duelo todavía se estaba sacando las lagañas, cuando un centro precioso de Jurado encontró la cabeza de David López. Remate de pique al suelo del 14, que entró al área como Pedro por su casa y 1-0. El madrugador gol del Espanyol cambió los planes de Sánchez Flores o, simplemente, puso todo en su lugar.

Las Palmas ni le dejaba tocar la pelota al Espanyol, pero al equipo canario le costó encontrarle las costuras a la zaga blanquiazul, bien colocada, cómoda sin la pelota. Las Palmas no consiguió su objetivo a través de su juego de toque, sino con un bombazo de Lemos desde la luna. El charrúa sacó un latigazo desde 50 metros, que se le coló a Diego López, generalmente inmenso bajo palos, ayer dubitativo.

El gol apagó a Las Palmas, pero no encendió al Espanyol. Fue el único bache de un partido precioso. Ni jugaba el equipo de Setién ni atacaba el cuadro blanquiazul. Y, cuando parecía que el primer acto de moría sin ninguna gracia, Piatti se escurrió en el área y le puso la pelota a Gerard Moreno para que la coloque en la escuadra de Lizoain. El paso por los vestuarios le cambió la cara al Espanyol. Se plantó en el campo canario e intentó un duelo de igual a igual. Las Palmas extrañó a Jesé, Halilovic y a Boeteng, inexpresivos en Cornellà. Ocurrió que lo que no hacían los delanteros, lo ejecutó el central Lemos. El uruguayo se filtró en área y selló, de cabeza, el 2-2.

El empate no alteró el plan de Sánchez Flores, el Espanyol insistió en su presión, dispuesto a demostrarle a los canarios que el fútbol alegre no solo se juega en Canarias. Estaba omnipresente Gerard Moreno y movedizo Caicedo. El 7, en el carril del 10, le metió un pase perfecto al ecuatoriano, que se comió en la carrera a David Simón y Lizoain no tuvo más remedio que parar a Caicedo con falta. Penalti para el Espanyol. Piatti se encargó de mandarlo a la red. El gol del argentino agrandó al conjunto blanquiazul. Y otra vez con Gerard Moreno como pasador, esta vez con Jurado como goleador. Pero Las Palmas no se rinde con facilidad. Halilovic se acordó de que cuando encara tiene pólvora y mandó un centro genial para Mateo. Lluvia de goles en el RCDE Stadium, para que el Espanyol estire, de nuevo, su ilusión europea.