Remontada ‘interruptus’ del Real Madrid ante el Galatasaray
Los de Laso levantan una desventaja de 18 puntos, pero caen por la mala gestión de los minutos finales
Faltaban 51 segundos para el final del tercer cuarto cuando, con un triple de Jon Diebler, el Galatasaray se colocó con 18 puntos de ventaja (73-55) en lo que parecía la certificación definitiva de la sexta derrota del Real Madrid en la Euroliga. Acabó por ser así pero, de camino, los blancos realizaron una remontada tan memorable como ‘interruptus’ en Estambul. En poco más de cinco minutos y medio el conjunto de Laso completó un parcial de 7-29, con nueve puntos de Randolph y ocho de Doncic, que dejó tiritando al Abdi Ipekçi (80-84, m. 38).
La demoledora ráfaga, sin embargo, no resultó definitiva. El Madrid se quedó seco y fue incapaz de gestionar los dos minutos finales, en los que no anotó un solo punto, y el Galatasaray se rearmó para llevarse el premio. Los puntos de Daye y Diebler (20 y 17 respectivamente) y los rebotes de Pleiss (12) neutralizaron el sobresaliente partido de Doncic (13 puntos, con 3 de 4 en triples; 8 rebotes y 8 asistencias) y los 16 puntos de Randolph.
La racha de nueve triunfos consecutivos del Madrid en Europa tocó a su fin por la endeblez en el rebote defensivo y la irreverente contabilidad de pérdidas de balón (18), el doble que su rival. Los blancos pierden su colchón en la pelea por el primer puesto, pero aunque el CSKA venciera mañana en el Palau ante el Barça mantendrían el liderato por su mejor basket average.
Tras una primera parte igualada (49-46), el Madrid cortocircuitó en un pésimo tercer cuarto (24-14) que situó a los de Laso ante una remontada a priori inabarcable. Lograron la proeza pero la tiraron por la borda, exhaustos tras la vibrante persecución. El Galatasaray no firmó la rendición y volvió a dominar el choque a 48 segundos del final con una canasta de Tyus. El Madrid desaprovechó entonces dos ataques cruciales y cedió dos rebotes defensivos en la penúltima jugada que le condenaron. Con 11 segundos de posesión y tres puntos de desventaja, Sergio Llull subió la última bola en busca de un triple que forzase la prórroga, pero fue frenado con falta. El menorquín erró sus dos tiros libres y el triple postrero de Doncic se fue por detrás del aro.
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