El Barça se dispara en Zaragoza

El Barcelona fue un vendaval en Zaragoza (75-86), desinflado solo en un prescindible último cuarto. Ya con todo resuelto, en un duelo que llegó a dominar por 26 puntos, desconectó a pesar del enfado de su entrenador Georgios Bartzokas, y recibió un parcial de 25-11. El croata Tomic se adueñó de la zona y el finlandés Koponen mareó al lituano Gecevicius y a toda la defensa del cuadro aragonés, muy vulnerable, especialmente destrozada a base de triples (15, 11 en la primera parte).

El chaparrón fue tal que al Barcelona le sobró hasta Rice y Bartzokas no alineó a Navarro. Cuando los engranajes funcionan, las bajas son relativas. El Barcelona las sufrió y en cantidad en los primeros meses, empezando por la de Koponen y su famoso accidente de taxi, pero lo definitivo es que no encontraba dinámicas de juego que le permitieran que fluyera la calidad técnica de sus jugadores. En Zaragoza, con el viento a favor tras sus victorias ante el Joventut y el Valencia en la Liga Endesa y ante el Armani Milán y el Darussafaka en la Euroliga, se sucedieron los alardes de Koponen, de Tomic, de Oleson, de Renfroe, de Vezenkov…

Todo le funcionó al Barcelona. La defensa del Zaragoza se bamboleaba porque ya desde el inicio de los ataques, Koponen, Rice o Renfroe creaban desajustes. Tomic recibió varios balones pegadito al aro, en esa zona en la que se convierte en un jugador determinante. Y cuando, no, los cañoneros del Barcelona se dedicaron a exhibir una puntería asombrosa. El cariz de la mejora del juego azulgrana se expresa en otro detalle revelador, el de la cantidad de asistencias que viene sumando en sus últimos partidos, 21 en Zaragoza. El equipo de Bartzokas suma 11 victorias e iguala al Real Madrid al frente de la clasificación, aunque la escuadra de Laso completa este martes la jornada (19.30) en la cancha del Baskonia.