_
_
_
_

Ontiveros fulmina al Deportivo

Un golazo sobre la bocina del canterano del Málaga vuelve a dar otro palo al equipo gallego, que comenzó ganando, igualó después una desventaja de dos tantos y volvió a morir en la orilla

Ontiveros corre a celebrar el gol de la victoria del Málaga ante la desesperación de los jugadores del Deportivo.
Ontiveros corre a celebrar el gol de la victoria del Málaga ante la desesperación de los jugadores del Deportivo.Jorge Zapata (EFE)

Lleva el descaro tatuado en el rostro Javi Ontiveros, al que ya se le ve de lejos que domina la pelota como si fuera una parte de su cuerpo. Aún no ha cumplido los veinte, apenas se está estrenando en Primera División y ya puede presumir de haber volcado varios partidos a favor del Málaga. Contra el Deportivo dio una vuelta de tuerca más, lo ganó con uno de esos goles que se sueñan, un zapatazo desde la frontal que entró cerca de la escuadra cuando el tiempo moría y el marcador estaba igualado.

La alegría del Málaga fue la decepción del Deportivo, que va de palo en palo. Tras el partido contra el Sevilla se le afeó a Garitano haber caído en los instantes finales de un partido en el que su equipo apenas manejó la pelota. En Málaga del Deportivo dominó con idéntica posesión que la que tuvo el cuadro de Sampaoli en Riazor. Pereció en la misma orilla. Garitano y su equipo se equivocan, seguramente bastante y por eso están abajo en la clasificación, pero la propuesta del equipo, desde luego en Málaga, merece mejor fortuna. También el orgullo. Al inicio de la segunda parte se vieron dos abajo sin saber muy bien como, pero acudieron a por la remontada plenos de fe y sustancia futbolística. Llegaron al empate, olfatearon la victoria y se llevaron una nueva derrota que además compromete el futuro del entrenador vasco, no ahora, pero sí en un futuro inmediato anterior al parón navideño El Deportivo se mide ahora en Copa al Betis y luego jugará contra Real Sociedad en Riazor antes de visitar el Bernabéu. Nada es sencillo para Garitano.

El Málaga ganó y eso fue lo mejor que le pasó en el partido. Comenzó a remolque porque Bruno Gama generó un penalti en el segundo minuto que embocó Borges. Sin balón, sin un dictado colectivo, el equipo de Juande Ramos se abandonó a las individualidades. También a las desatenciones del rival. En lo que va de temporada el Deportivo siempre ha salido al campo con la lección bien aprendida, preparado, dispuesto a recitarla de principio a fin. El equipo gallego es como una obra bien diseñada que se cae en cuanto la cimbrea el viento. Tiene alma de débil naipe. Con muy poco se vio detrás en el marcador, una contada llegada al área en la que Santos ganó la posición, Borges le agarró y propició un penalti que aprovechó el atacante uruguayo. Poco después Albentosa cometió tres errores en diez atolondrados segundos y propició una falta en la frontal que Sandro colocó literalmente en la escuadra.

Uno abajo, pasado el tamiz del descanso, el Deportivo palideció. Lo hizo más cuando Santos volvió a anotar en un remate en semifallo imparable para Tyton. Pero justo en ese límite, con todo perdido se levantó el honor del Deportivo, llegó además una buena decisión de Garitano, que desplazó a Marlos Moreno hacia la mediapunta, orilló al improductivo Fayçal Fajr y acabó por suplirlo por Carles Gil, que no dejó de asociarse con sus compañeros. Buscó el gol con desesperación el Deportivo, descontó por mediación de Andone, que ha marcado en los tres últimos partidos tras su larga abstinencia de inicio de campeonato, se topó además varias veces con Kameni, que iba para héroe una vez más y pudo acabar en villano porque entre el aguacero que cayó en La Rosaleda un centro de Gil se le escapó entre las manos y valió el empate de Borges. El gol de Ontiveros fue tan bello como injusto para el devenir del partido, pero eso poco le importa al Málaga, tampoco al Deportivo, quizás ni siquiera a Garitano cuando se vaya al paro lamentando que todo lo que puedo salir mal acabase peor y todo lo que pudo salir bien le fuese regular.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_