Competición señala al Barça

El Valencia deberá pagar una multa de 1.500 euros por los incidentes del partido del sábado contra el Barça. Así lo determinó el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol. No sorprendió la sanción después de que desde el Gol Nord se arrojaran objetos mientras los jugadores azulgrana celebraban el gol de penalti de Messi y una botella de agua impactaba en Neymar. “Si bien no produjo lesiones ni interfirió en el normal desarrollo del juego, constituyen unos hechos con riesgo de producir las meritadas e indeseables consecuencias”, reza la resolución del Comité, que por lo demás califica de “energúmenos” a los agresores de Mestalla.

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La novedad estuvo en que el fallo condena también las formas de los jugadores del Barcelona en la celebración del 2-3. “No debe pasarse por alto”, asegura el comunicado; “el reprochable comportamiento que muestran algunos jugadores del FC Barcelona al dirigirse con ciertos gestos y expresiones hacia el público durante la celebración del gol”. A su juicio “no constituye un ejemplo de deportividad la exagerada reacción que tuvieron algunos jugadores a los que sin haberles llegado a alcanzar ninguna botella, simulan o fingen de forma simultánea haber sido golpeados igualmente por un objeto más contundente”, acaba la resolución del Comité, que incide en que el comportamiento de algunos jugadores es “poco ejemplar” y “les descalifica y ridiculiza por sí solos”.

El Barcelona no tardó en responder a la resolución del Comité, que calificó como “totalmente reprobable y abusiva”. “Convierte en culpables a las víctimas de un comportamiento claramente condenable y expresado en múltiples formas, antes, durante y después del partido: expresiones ofensivas, descalificaciones al árbitro por parte del personas y medios pertenecientes al Valencia, lanzamiento de objetos”, se lee en el comunicado del Barça. “El Comité debería haberse limitado a analizar los hechos y aplicar las normas vigentes, obviando cualquier valoración” se agrega, para después pedir “responsabilidad e imparcialidad” y considerar que el Comité obvia un “clima hostil” y en “algunos casos violento” que desemboca en una “agresión hacia los jugadores, que solo pueden reaccionar expresando su indignación por los hechos”.

Mala relación con la Liga

El club azulgrana se siente tan dolido con el Comité como con la Liga de Fútbol Profesional, cuyo presidente, Javier Tebas, arremetió contra los futbolistas en la misma línea del fallo del Comité de Competición. “Parecía un juego de bolos e igual sintieron el agua”, ironizó el máximo responsable de los clubes, sobre el comportamiento de Neymar. “A mí me daría vergüenza fingir como los jugadores del Barça”. Y prosiguió: “Hay millones de niños que nos están viendo. No me gustó lo que pasó... No sé si fue Neymar o quiénes fueron, pero esas conductas hay que evitarlas”, aseguró a Sportyou. Y en la misma línea se pronunció Ximo Puig, presidente de la Generalitat valenciana: “No justificaré un botellazo o un insulto, pero los profesionales que saltan al terreno —están muy pagados—, no pueden afrentar al público”.

Las declaraciones de Tebas tuvieron respuesta en el vicepresidente deportivo azulgrana Jordi Mestre: “Tebas debería evitar que haya violencia en los estadios en vez de atacar a los jugadores, que son los que dan espectáculo, especialmente los del Barça, que le permiten vender la Liga en China, Asia o Estados Unidos”.

Las malas relaciones entre la Liga y el Barça se reflejaron el lunes en la gala de la patronal en Valencia al que no acudió ningún azulgrana ni Luis Enrique: “De lo que se deben preocupar los dirigentes es de mejorar el fútbol”, dijo el técnico del Barça.

Al Barcelona no le gustó ni el día ni el horario del partido contra el Valencia ni el trato recibido en el palco, en el vestuario, en distintas zonas del estadio y menos en el campo, denunciado por jugadores, directivos y empleados del Barça. Y ayer sorprendió el fallo del Comité de Competición. Un portavoz del club denunció que las multas recibidas por el Valencia la temporada pasada y por el Espanyol —4.000 euros—, después de que se exhibieran pancartas ofensivas en Cornellà, contrastan con las sanciones de 30.000 euros que recibe el club por las esteladas de la Champions.