Soyez, el técnico francés que ha cambiado el chip del hockey español
La selección incide en la mejora física y el trabajo en equipo tras el adiós de Amat, Freixa y Tibau
Los sticks españoles golpean al compás de la estrategia francesa, la que programa Frederic Soyez. Su madre practicaba el atletismo, como su padre, que cambió de deporte y fundó un club de hockey hierba, en Valenciennes. Allí, en el norte de Francia, Soyez inició una fantástica carrera como jugador, que prosiguió en la vecina Lille, antes de ser fichado por el Club de Campo Villa de Madrid. Concluyó su carrera tras ganar títulos con todos los equipos en que militó y batir el récord de internacionalidades con la selección de su país.
Poco después, finalizó un máster de management y mercadotecnia y se sacó todos los títulos de entrenador. Dirigió al Lille y tras estar cuatro años al frente de la selección francesa, fue el hombre en el que confió la federación española para gestionar el inevitable cambio que debía producirse. Pol Amat, Santi Freixa y Edi Tubau se retiraron. “El tridente mágico se fue y, además, tras el Mundial, se retiraron ocho jugadores. Cuando se pierde a jugadores de esta calidad y experiencia, se necesitan jóvenes con otros valores”, cuenta Soyez.
“Lo primero ha sido hacer entender a los jugadores que no poseemos el nivel que tenía el equipo de 2014. Hablamos con ellos, cambiamos la forma de entrenar, les metimos más caña y les propusimos un plan para mejorar aspectos que, según me habían comentado, no se habían trabajado durante el último ciclo. No juzgo el trabajo anterior, pero llegué con mis ideas y, la esencial, era aumentar y mejorar en la carga de trabajo”, indica el seleccionador de 38 años. “Con Fred hicimos una apuesta de alto nivel que no habíamos podido afrontar durante los años anteriores debido a las dificultades que sufrimos”, relata el secretario general de la federación, José Antonio Gil.
“Cogí el equipo a medio ciclo olímpico, con apenas dos años para preparar la competición”, explica Fred. “Tras una generación muy, muy buena, teníamos que volver a otros valores. Ha sido un camino largo y duro. Contamos con menos talento puro, como el que había antes. Hemos incidido en un trabajo más de equipo y más físico. Otros equipos nos superaban gracias a esos aspectos. Y ha ido bastante bien. Pero nuestros rivales también han mejorado su nivel. La evolución del hockey ha sido notable. Estamos en el puesto 11 en el ranking mundial. Y además, muchas de esas selecciones tienen más medios económicos. Pero, dentro de lo que hay, hemos hecho un buen trabajo para competir”.
Soyez envidia las facilidades de selecciones como Holanda o Australia, que preparan la cita olímpica prácticamente durante todo el año. “El presupuesto de las selecciones que están en el Top 6 mundial es entre diez y veinte veces mayor que el nuestro. Son profesionales. Poseen más técnicos, más material. Por ejemplo, casi todos los equipos trabajan con un material GPS que nosotros no nos podemos permitir. Son detalles que al final marcan la diferencia”. La mejora del equipo español se ha conseguido a base de incidir en fuerza y explosividad. “De esta forma no podemos acercar al nivel de equipos como Gran Bretaña o Bélgica”, conviene el seleccionador español.
El objetivo en Río es la clasificación para los cuartos de final. “No podemos vivir del pasado. Hemos jugado contra casi todos los equipos del Top 12 y, Australia aparte, hemos sido capaces de ganar a casi todos. Pero por ranking no deberíamos entrar entre los cuatro primeros. A partir de ahí, cada uno es libre de soñar con lo que sea”, cierra Frederic Soyez, al frente de una de las selecciones españolas que colecciona más medallas olímpicas, bronce en Roma 1960 y plata en Moscú 1980, Atlanta 1996 y Londres 2008.
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