Coleman: “Sabíamos que éramos los tapados”
El técnico de Gales recuerda que ya advirtió que no estaban de paseo por Francia y señala a la unión del grupo como la clave del equipo
Supersticiosa como es la selección de Gales, el capitán Ashley Williams y el técnico Chris Coleman salieron a la palestra antes del partido como ya hicieran en los otros cinco duelos previos del torneo. Dos días antes, habló Bale, también como acostumbran los Dragones, la sorpresa de la competición que se defiende con un fútbol notable, siempre con el balón como protagonista y tratando de sacarlo limpio desde atrás, lejos del presupuesto pelotazo o las contras que practicaban los demás equipos británicos. Y eso es lo que pretenden ante Portugal en toda una semifinal de la Eurocopa. “Lo que me preocupaba era pasar la fase de grupos porque sé lo que es el fútbol, donde puede pasar cualquier cosa”, explicó Chris Coleman en la sala de prensa del Stade Les Lumières, o Parc OL como se conoce popularmente en Lyon; “pero luego pensamos en octavos, en cuartos… Y aquí estamos”. Aunque también sacó pecho: “Teníamos opciones de pasar y así se lo dije a los míos. Ya avisé que no veníamos de vacaciones”.
Ahora se miden con Portugal, un equipo que tan sólo ha podido batir a un rival en la prórroga (Croacia) y que ha empatado el resto, resueltos los cuartos en la ruleta de los penaltis frente a Polonia. “Es un buen equipo que lo está haciendo muy bien”, reivindicó Coleman; “cuando atacan lo hacen rápido y con muchos jugadores. Una vez Fabio Capello dijo que cuando defiendes lo haces con 11 y cuando atacas, también. Y es verdad”. Entre ellos, claro, destaca a Cristiano Ronaldo. “Me habló de él Ferguson el primer día. Y cuando lo ves en el campo, con sus ganas de vencer y de marcar, ves que siempre quiere ser mejor. Tiene un talento brillante. Pero no solo es talento, también es mentalidad. En eso es como Bale”, expuso Coleman. Y se sumó Williams: “Es uno de los mejores del mundo, pero también tiene un equipo detrás”. Justo la filosofía que predica Gales.
No puedes pretender que un jugador sea esencial sino hay un gran ambiente de equipo. Él [Bale] es uno más y disfrutamos de estar juntos"
“Estamos buscando técnico para Bélgica, ¿se animaría?”, le cuestionó un periodista. “Los jugadores belgas me debieron hacer muy sabio, pero son un gran equipo. Lo que pasa que salió bien la táctica que usamos. Aunque si no tienes los jugadores para salir al campo y competir, nunca pasará nada. Todo esto va de los jugadores, del equipo”, reflexionó Coleman. Por eso, dijo no abrumarse ante sus ausencias para el duelo, los sancionados Ramsey y Davies. “No estoy preocupado en absoluto. Los chicos conocen el trabajo y saben qué hacer. Están todos confiados, por más que Ramsey sea uno de los mejores jugadores de este torneo y Davies haya crecido mucho”, aclaró. Williams tomó la palabra: “Nos sabe mal por ellos, pero aquí se necesitan a los 23 hombres. Así que entrarán otros dos al equipo y no hay dudas sobre ellos”.
Sí que las había, sin embargo, sobre Gales antes de empezar el torneo, equipo al que se le tildó de Cenicienta. “Hay millones de opiniones en un torneo como este. Son puntos de vista, pero decidimos centrarnos en lo nuestro y creer el uno en el otro. Sabíamos que éramos los tapados, pero no nos importaba. Creímos en nosotros. Eso no era garantía de un resultado feliz, pero teníamos que dar lo que sabíamos que podíamos dar”, afirmó Coleman. Con Bale, claro, como bandera del equipo. “No puedes pretender que un jugador sea esencial sino hay un gran ambiente de equipo. Él es uno más y disfrutamos de estar juntos. Ya sabemos que todo es soleado cuando se gana, pero también estamos unidos en los momentos duros. Ese es el secreto”, reveló. Hacía referencia a Gary Speed, el exseleccionador que se quitó la vida en 2011. “Es un icono para nosotros. Pienso en él cada día, en mi amigo, y ojalá pudiera estar aquí donde estoy sentando, disfrutando de esto”, expuso Coleman. Intervino Williams: “Creo que estaría orgulloso de nosotros”.
Todo Gales lo está y, en caso de caer en semifinales, Coleman advirtió: “Es un camino de aprendizaje para que en los próximos años estos jugadores puedan tener éxito. No es el final del grupo”. Queda por ver qué ocurre mañana. Mientras tanto, Gales no cambió sus hábitos porque tras la rueda de prensa no entrenó en el campo del Olympique de Lyon sino que simplemente dio un paseo por el césped. Siempre lo hizo así desde que llegó a Francia y siempre le fue bien.
